Cuatro policías ministeriales, acusados de tortura y maltrato en el caso Tlatlaya, obtuvieron su libertad bajo reservas de ley, luego de que pagaran una fianza de casi 70 mil pesos casa uno.

 

Debido a que el delito de tortura no es considerado grave en la entidad, la defensa de los ministeriales pidió la medida cautelar que les fue conocida al pagar la fianza.

 

Los policías abandonaron las instalaciones del Penal de Santiaguito en el municipio de Almoloya de Juárez en el Estado de México.

 

El miércoles, siete policías ministeriales de Procuraduría General del Estado de México (PGJEM) fueron señalados por su probable responsabilidad en la comisión de actos de tortura y malos tratados tras los hechos del 30 de junio de 2014 en el municipio de Tlatlaya donde 22 personas murieron presuntamente en un enfrentamiento contra efectivos del Ejército.

 

En el caso de los otros tres inculpados restantes, el juez no obsequió la orden de aprehensión, y en el transcurso de este viernes se espera que se determine si se sujetan a juicio.

 

 

Con información de Radio Fórmula