No hay, no existe un némesis más grande para los felinos en Liguilla que su archirrival el América, que no sólo ha echado a los universitarios de las dos últimas fiestas grandes a las que han entrado, sino que ambas eliminaciones han sido preludios de coronaciones águila.

 

El primero de los recientes enfrentamientos sucedió en el Clausura 2013, cuando Pumas se metió en el séptimo lugar para enfrentar al sublíder general en Cuartos de Final. La ida en Ciudad Universitaria se la llevó el América con gol de Raúl Jiménez y, en la vuelta, completaron el trámite con otra victoria 2-1, con un par de tantos de Christian Benítez.

 

En ese mismo torneo, las Águilas lograron el pase a la Final contra el Cruz Azul, de Guillermo Vázquez, que presumía una marca de haber ganado ocho de sus 9 partidos anteriores. Sin embargo, con 10 hombres en la cancha, los emplumados se coronaron campeones en serie de penaltis.

 

Para el Apertura 2014 se volvieron a encontrar de nuevo en Cuartos de Final. De nueva cuenta la llave se abrió en CU y los Pumas, ya con Guillermo Vázquez en el banco, ganaron con solitario gol de Eduardo Herrera, pero en la vuelta Paolo Goltz igualó el marcador para pasar por mejor posición en la tabla.

 

De tal manera que el marcador va dos a cero a favor de los amarillos y su entrenador en las más recientes Liguillas. Aunque las circunstancias en las que ahora llega Pumas, mantienen la expectativa de que la tercera pueda ser la de la venganza, sobre todo por su condición de superlíder, misma que aprovecharon en la temporada 90-91 para imponerse a su archirrival en la Final y coronarse campeones, en el que el América también entró en el lugar seis a la Liguilla.