La temporada de verano y los incentivos de Estados Unidos, el primer productor del mundo, para seguir bombeando petróleo, serán un contrapeso para alcanzar mayores precios del crudo, a pesar del acuerdo anunciado este jueves entre los países miembro y no miembros de la OPEP para extender el recorte a la producción.

 

En un análisis, el banco Ve Por Más señaló que tras conocerse la noticia, la mezcla texana WTI perdió más de 1.0% debido a que el anuncio ya estaba descontado y de que el recorte no fue más pronunciado al pactado para la primera mitad de 2017, de 2.0% de la oferta.

 

Tal como se esperaba, este jueves la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y otros grandes productores responsables de más de la mitad de la oferta mundial, pactaron prolongar por nueve meses el recorte de sus suministros aún vigentes este semestre.

 

Los ministros justificaron la necesidad de prolongar el recorte para conseguir drenar los inventarios de crudo en los países consumidores, que se encuentran por encima de la media de los últimos cinco años, con el objetivo de reducir la sobreoferta que presionaba a la baja los precios.

 

Sin embargo, los mercados castigaron la decisión de la OPEP con una caída de la cotización del petróleo cerca de 5%, ya que algunos miembros de cártel habían pedido aumentar el recorte y prolongarlo aún más en el tiempo.

 

Tras conocerse el acuerdo, y al cierre de los mercados europeos, el precio del barril de petróleo Brent, de referencia en Europa, cayó 4.63% , situándose en 51.35 dólares. Por su parte, el West Texas, de referencia en Estado Unidos perdió 4.79% de su valor.

 

El ministro de Petróleo de Arabia Saudí, Jalid al-Falih, y presidente de turno de la OPEP, recordó que la aplicación del recorte se ha cumplido en 102%, aunque reconoció que aún queda trabajo por hacer para colocar esos inventarios al menos en la media de los últimos cinco años.

 

En la OCDE, que agrupa a los países más industrializados y que más crudo consumen, eso supondría reducir las reservas en unos 270 millones de barriles.

 

De hecho, el ministro mencionó la posibilidad de prorrogar aún más los recortes si en noviembre, cuando los signatarios del acuerdo volverán a reunirse, la situación del mercado así lo requiere.

 

Lo que sí descartó es que aumente el volumen de crudo que se retira del mercado, para decepción de los mercados, que ya habían descontado el escenario de una prórroga de los recortes.

 

aarl