Familiares, equipos especializados del Ejército, Marina y Policía Federal resguardan el sitio en un radio de menos de 50 metros, que está rodeado también por voluntarios a la espera de mejores noticias luego de que se informó que la cifra de muertos aumentó a 37; 32 niños y 2 adultos.

 

El sitio es el más silente de voces, solo se escuchan las plantas de electricidad que alumbran esa parte de la colonia nueva oriental Coapa y una que otra maquinaria.

 

No hay hay más ruido, la gente guarda silencio para facilitar escuchar a posibles vìctimas con vida, que Los Topos buscan entre las maderas que van metiendo entre escombro.

 

Queda la esperanza de que a más de 15 horas del sismo de 7.1 que castigo a la Ciudad de México, aún estén con vida.

 

Personas de varios puntos de la ciudad han llegado a ofrecer la solidaridad en trabajo, medicinas, comida y hasta en un abrazo fraterno para la gente que desde las 13:20 horas se improvisó como rescatista y esperó con fuerza moviendo rocas en tanto llegaba el Plan DNIII del Gobierno Mexicano que ahora tiene a su cargo la encomienda presidencial de rescatar personas.

 

Huele a polvo y tristeza, se repite entre quienes cuentan la historia de los niños del Répsamen a unos minutos de amanecer en la Ciudad de México.

 

 

 

Nombres de los niños rescatados | FOTO: Deborah Cordero

 

Voluntarios y familiares colocaronn un panel informativo de los nombres de los niños hallados en Repsamen (06:14).