Hay que vender muy caro el amor, se dice en el bajo y escabroso mundillo de la política. Eso fue lo que intentó hacer la señora María Alejandra Barrales Magdaleno cuando rechazó, el 19 de enero de 2012, el resultado de las encuestas que declaraban vencedor y cuasicandidato de las izquierdas para el Gobierno del Distrito Federal a Miguel Ángel Mancera.

 

En aquel entonces, Barrales se desbarrancó en un rabioso y breve berrinche, con el único propósito de vender caro su amor al vencedor de las encuestas. Desde semanas antes de que se realizara el sondeo, las señales apuntaban hacia Mancera, y era previsible el resultado final, que solamente fue “sorpresivo” e inaceptable para la ex lideresa del Sindicato de Sobrecargos de México.

 

Ella nunca tuvo posibilidades reales de alzarse con la candidatura, por la poderosa razón de que no contaba con el apoyo de Andrés Manuel López Obrador y porque, además, la ayuda que recibió de Marcelo Ebrard fue, para decirlo rápido, muy frágil, quebradiza. Cuando Mario Delgado no respondió a las expectativas de crecimiento político, Ebrard actuó: primero desechó al delfín, luego marginó a Barrales y al final apostó por Mancera.

 

En un desesperado intento para reposicionar a la precandidata, Carlos Navarrete -otro aspirante- declinó en su favor, pero fue inútil. Mancera ganó, Barrales perdió, ella amagó con la rebelión…, pero el berrinche le duró apenas siete días, y dobló las manitas. Aunque a su debido tiempo recibirá su premio de consolación, comentamos en su oportunidad.

 

¡Y llegó el día de cobrar! El 16 de julio pasado, la “Seño Ale” fue electa presidenta nacional del PRD para el periodo 2014-2017, con la encomienda de Andrés Manuel López Obrador –de quien es íntima “cuatacha”, dicen los que conocen al tabasqueño–, de negociar una alianza “pervertida, casi gay”, como las calificó Oscar Levin Coppel, para que Alejandro Encinas sea el candidato de la unidad del PRD y Morena. ¿Y la “delfina” del Peje? Preguntan los analistas bisoños, en referencia a la señora Delfina Gómez, a quien aquél ya ungió como candidata de Morena. Pues eso fue nada más para despistar, afirman los que saben.

 

¿Entonces la señora Barrales les “está dando atole con el dedo” a los del PRD, haciéndoles creer que el partido está más vivo que nunca y que hay PRD para rato? Insisten en preguntar los bisoños. No sólo eso, “Ale” se la va a jugar con AMLO en 2018, porque es el único que la puede recompensar. ¿Con la candidatura al gobierno de la “City”? No, hombre, ésa ya está apartada, responden los que dicen que saben.

 

AGENDA PREVIA

 

Dicen los “fans” de Alfredo del Mazo, que independientemente de sus lazos familiares, en su desempeño como servidor público ha sabido ganarse el respeto y la confianza de los mexiquenses por su capacidad de trabajo y logros alcanzados. Bajo su mandato, Huixquilucan se convirtió en el primer municipio del país que logró proveer a todas sus escuelas de nivel básico, medio superior y superior con equipo de cómputo e Internet, además de que consiguió sanear las finanzas del municipio, entre otras acciones. ¿O sea?