Dos incidentes ocurridos en los últimos días en Guerrero y Tamaulipas, en el contexto de los operativos desplegados contra la delincuencia, fueron atraídos por la Procuraduría General de la República (PGR). Se trata del ataque con granadas a un hotel en el que se hospedaban policías federales y el accidente de una aeronave naval de reconocimiento.

 

La agresión con los artefactos explosivos ocurrió la mañana del sábado en el Hotel Jacarandas de Chilpancingo, que alberga a más de 300 elementos de la Policía Federal que llegaron en marzo a relevar a los uniformados municipales en los trabajos de seguridad pública.

 

Fueron dos granadas de fragmentación las que personas a bordo de un vehículo en marcha, arrojaron a la entrada principal del hotel, el cual está ubicado a unos 300 metros de la residencia oficial del gobernador de la entidad.

 

No se registraron lesionados ni daños, porque una de las granadas detonó en el aire y la que si llegó al suelo no se activó.

 

La PGR también encabezará las pesquisas por el desplome de una aeronave Lancair de la Armada de México, y que dejó como saldo la muerte de dos marinos. El incidente ocurrió el 10 de abril en Tamaulipas.

 

En el marco de los operativos contra el crimen organizado en la entidad, la aeronave realizaba un sobrevuelo de reconocimiento cuando se desplomó a la altura del kilómetro 88 de la carretera González–Manuel.