Con una inversión de 21 millones de pesos, la Oficina de la Presidencia de la República reforzará la seguridad del presidente Enrique Peña Nieto, a través de la compra de equipo de telecomunicaciones para tareas de seguridad nacional y la renovación de parque vehicular.

 

El Estado Mayor Presidencial (EMP) tiene dos proyectos registrados ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público por un monto total de 21 millones 202 mil 209 pesos, relacionados con preservar la integridad del mandatario nacional.

 

De acuerdo con la cartera de inversión 14022100005, al órgano militar le fueron autorizados cinco millones 202 mil 209 pesos para la “adquisición de equipos y aparatos de comunicaciones y telecomunicaciones”, insumos tecnológicos necesarios para la protección presidencial, lo que se considera un asunto de seguridad nacional.

 

El objetivo de la inversión es “contar con equipos actualizados que representen mayor calidad, capacidad, seguridad y versatilidad, en el desarrollo de las actividades cotidianas del Estado Mayor Presidencial, así como generar ahorros por concepto de mantenimiento preventivo y correctivo”.

 

Las características de los equipos de telecomunicaciones que se comprarán están catalogadas como reservadas y sólo se especifica que “con la adquisición de los bienes que se describen, se pretende contar con equipos para brindar el apoyo en las actividades cotidianas del titular del Ejecutivo Federal en los diferentes estados de la República Mexicana”.

 

Además, con la tecnología de punta, “el Estado Mayor Presidencial contará con activos suficientes para el cumplimiento de sus actividades sustantivas en los diferentes eventos simultáneos de la agenda Presidencial”.

 

Nuevo parque

 

Con una inversión de 16 millones de pesos, registrada ante la Secretaría de Hacienda bajo el número de cartera 15022100001, el Estado Mayor Presidencial sustituirá parte del parque vehicular presidencial por “nuevas unidades confiables y seguras para realizar integralmente las tareas de seguridad y logística”.

 

Entre los objetivos, según el proyecto, se pretende hacerse de unidades móviles con sofisticada tecnología para “reducir costos por concepto del arrendamiento de nuevas unidades, minimizando riesgos en materia de seguridad”.

 

Las características como número de vehículos adquiridos, marca y tipo se encuentran clasificadas como reservadas por motivos de seguridad nacional, y la versión pública del proyecto, sólo indica que con la “ejecución del presente programa de adquisición, en por lo menos ocho años, se dará cumplimiento para las actividades sustantivas del Estado Mayor Presidencial”.

 

Es decir, que las unidades compradas este año estarán disponibles para su funcionamiento hasta el final del sexenio de Enrique Peña Nieto, en 2018, y cinco años de la siguiente administración.

 

En septiembre de 2014, este diario publicó que la Oficina de la Presidencia contempla un presupuesto para 2015 de mil 124 millones de pesos para garantizar la seguridad del presidente Enrique Peña Nieto, así como 500 millones de pesos para los servicios de transportación aérea de la flota de helicópteros y el par de aviones presidenciales.

 

Presume Peña reformas a obispos

 

El presidente Enrique Peña Nieto presumió a los integrantes de la Presidencia de la Conferencia del Episcopado Mexicano los avances en la instrumentación de las reformas estructurales, emprendidas al inició de su gobierno.

 

En la residencia oficial de Los Pinos, el mandatario nacional se reunió con la cúpula católica y su Consejo Permanente, encabezados por su Presidente, el Cardenal Francisco Robles Ortega.

 

De acuerdo con información de la Presidencia de la República, el jefe del Ejecutivo diálogo con la Conferencia del Episcopado Mexicano “en torno a la agenda de transformación de México que impulsa el Gobierno de la República”.

 

En dicha reunión, Peña Nieto estuvo acompañado por el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y ambos expusieron los avances en “las cinco prioridades que tiene el Gobierno de la República: Fortalecimiento del Estado de Derecho, combate a la corrupción, poner las reformas estructurales en acción, impulsar la estabilidad macroeconómica y atender los desequilibrios regionales”.

 

El mandatario señaló que su objetivo primordial es mejorar la economía de las familias mexicanas porque “sólo un país que produce riqueza y que crece económicamente, puede generar mayor bienestar para la población”.

 

Indicó que comparado con otras economías emergentes, “México se encuentra en un escenario óptimo, ya que los datos de empleo y de inflación en lo que va del año son satisfactorios”.

 

Y destacó la buena relación y el diálogo permanente que tiene el Gobierno de la República con la Iglesia Católica, y con todas las iglesias de México.

 

A la reunión también asistió el Nuncio Apostólico, Christophe Pierre, y los integrantes de la Presidencia y del Consejo Permanente de la Conferencia del Episcopado Mexicano expresaron su reconocimiento al Presidente Enrique Peña Nieto por las reformas estructurales.

 

Peña Nieto respondió que “por supuesto no vamos a claudicar” y, al mismo tiempo, les exhortó a sembrar confianza y buen ánimo entre las familias mexicanas.