En unos años Intel Corporation ya no será la misma empresa que conocimos a principios del 2000, ni una de las que se está aferrando a su antiguo liderazgo en el terreno de los grandes procesadores, incluso en su rama de almacenaje, que ha escalado posiciones a nivel global en los últimos años.

 

Intel renunció a la movilidad en teléfonos y tabletas, y ahora quiere transformarse en una empresa disruptiva que vista a las próximas generaciones con tecnología más integrada a sus cuerpos. Para lograr esto, la empresa de procesadores eligió a México como su punta de lanza y GeekPosts platicó con uno de sus directivos al respecto:

 

“Intel está tomando el liderazgo de manera bastante anticipada en el mercado y México es el país más importante en América Latina que está participando en ello”, dijo Fernando Martínez, director de educación de Intel México.

 

Una de las tácticas de Intel para conquistar el mercado de wearable tecnology en un lapso de cuatro o cinco años, es Make it Warable, un concurso lanzado por la compañía a nivel global para conocer de la mano de la gente que usa, desarrolla e imagina la tecnología, cómo visualiza esto de la tecnología vestible.

 

“Efectivamente, en Make it Wearable estamos buscando a los pioneros en la innovación y la creatividad, ahora ya estamos viendo gafas, pulseras, relojes, pero el cómputo vestible es más amplio que esto, será una revolución vestible”, dijo Martínez.

 

El objetivo del concurso en el que México cuenta con 35 participaciones, es acelerar el desarrollo a nivel global de esta nueva categoría de cómputo, y para ello cuenta con dos categorías: “Visionarios” y “Desarrolladores”. La primera abrió su inscripción desde enero (y se extenderá hasta el 15 de junio) y aceptará propuestas en cinco rondas, una cada mes. En esta etapa, los participantes deben crear un video, cuya duración no debe superar el minuto, para presentar en inglés su idea de tecnología de cómputo vestible y como ésta podría contribuir a mejorar la vida de las personas.

 

En la categoría “Visionarios” la compañía buscará premiar el pensamiento creativo y futurista en la que la compañía dará reconocimiento y apoyo a las ideas que cuenten con potencial.

 

“Los microprocesadores y las microtarjetas se popularizarán para la construcción de computo vestible: Antes armabas tu computadora, ahora será un proceso similar, ya que se conmtarán con sistemas integradores para hacer joyería, ropa, no sólo para monitorear el cómputo vestible, sino para expresarnos, para comunicarnos”, detalló.

 

De acuerdo con Martínez, a pesar de que en el mercado ya existen empresas como Google que lanzó sus lentes desde hace un año y como Machina, la startup mexicana de wearables, Intel no está llegando tarde a esta revolución, de hecho, la empresa está acelerando la innovación en este mercado naciente:

 

“En cinco años habrá una evolución de estas aplicaciones, habrá una gran cantidad de desarrolladores, la industria tiene que participar con su conocimiento, y el mercado empezará a demandar”, dijo Fernando Martínez.

 

De acuerdo con el directivo, prueba del papel que tiene México en esta estrategia es la construcción de su Centro de Desarrollo en Guadalajara, Jalisco, la cual contó con una inversión de tres mil millones de pesos.

 

Decisiones de negocio

 

Como informó 24 HORAS, el replanteamiento del negocio de Intel, llevó a su salida de Costa Rica, en donde sus ventas representaban aproximadamente el 6% de su Producto Interno Bruto real.

 

“Son decisiones de negocio, el mercado está en constante movimiento y tuvimos que reorganizar nuestra parte de manufactura para eficientar nuestra operación. Esta decisión es para estar preparados para la competencia en esta industria donde de un año a otro, las operaciones se pueden mover de un país a otro”, dijo al respecto Fernando Martínez.

 

En 1996 se dio a conocer en Costa Rica la llegada de la que fuera en ese momento la compañía de producción de microprocesadores más grande del mundo, en la planta que sería inaugurada en 1997 se ensamblarían procesadores Pentium II para computadoras de escritorio.

 

Su llegada sería una de las inversiones extranjeras más grandes realizadas en ese país, consolidándose hasta llegar a representar más del 6% del PIB costarricense en el 2012 y ser uno de sus principales exportadores.

 

Sin embargo, el mercado cambió y la movilidad, soportada por smartphones y en años más recientes por tablets fue toda una revolución, que modificó el mapa de los principales participantes en la industria de la tecnología y la innovación a nivel global.

 

Es por ello que en 2013 Intel replanteó su estrategia y anunció la fabricación de chips más pequeños, que fueran compatibles con una tecnología ya no portable, sino vestible.