Con las políticas antiinmigrantes que se propone la nueva administración de Donald Trump, Estados Unidos aceleraría la pérdida de su fuerza laboral, pues se calcula que entre 2015 y 2035, el segmento de adultos estadunidenses en edad de trabajar, hijos de padres nacidos en EU, se reducirá en ocho millones.

 

 

 

Según proyecciones del Centro de Investigación Pew, esta pérdida será compensada parcialmente por el número de adultos que nacieron en ese país, pero que son hijos de inmigrantes, cuya cifra aumentará en 13.5 millones en ese lapso.

 
Sin embargo, medidas como la deportación de varios millones de mexicanos que ha anunciado el nuevo Presidente podrían revertir esta tendencia, considerando que las estadísticas muestran que por cada trabajador que regresa a México se trae a tres más, dijo recientemente Jaime Serra Puche, una pieza clave en la negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

 
En una conferencia, en febrero pasado, el ex secretario de Comercio, dijo que ha faltado “talento” para enfrentar la tendencia poblacional en América del Norte, en donde México, con su bono demográfico, ha contribuido de manera importante a la competitividad de la región frente a una tendencia de envejecimiento tanto en Estados Unidos como en Canadá.

 

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Infografía: Juan Ángel Espinoza

 

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En Estados Unidos existe demanda por mano de obra, por lo que ha faltado un esquema de movilidad laboral que permita este flujo racional, opinó el economista.

 
El análisis del Centro Pew indica que los baby boomers -estadunidenses nacidos después de la Segunda Guerra Mundial y antes de 1965- han sido el principal motor de la creciente fuerza laboral de esa nación, pero a medida que esta gran generación se retire, se desacelerará marcadamente y los inmigrantes (que incluye tanto a los ilegales como los autorizados) jugarán el papel principal en el crecimiento futuro de la población en edad de trabajar, es decir de 25 a 64 años, aunque seguirán siendo una minoría.

 
Las proyecciones apuntan a que el segmento de adultos en edad laboral, hijos de estadunidenses, disminuya entre 2015 y 2035 de 128.3 millones a 120.1 millones. En cambio, el número de personas nacidas en Estados Unidos cuyos padres son inmigrantes, pasaría de 11.1 millones a 24.6 millones.

 
Se prevé que el número de inmigrantes en edad de trabajar aumentará de 33.9 millones en 2015 a 38.5 millones en 2035, pero este incremento será resultado principalmente de la llegada de nuevos trabajadores, pues la cifra de los actuales disminuirá, ya que algunos cumplirán 65 años y otros abandonarán el país o morirán.

 
“Sin estos recién llegados, el número de inmigrantes en edad laboral disminuiría en 17.6 millones en 2035, al igual que la población total proyectada en Estados Unidos en edad de trabajar, que se reduciría a 165.6 millones”, puntualizó el estudio.