Las fracciones del PRI, PAN y PRD en la Cámara de Diputados se enfrentaron ayer por los alcances de la Ley anticorrupción que propuso Acción Nacional, de forma inicial, en el Congreso de la Unión.

 

Héctor Gutiérrez de la Garza, vicecoordinador del PRI, afirmó que su fracción está dispuesta a aprobar el dictamen de la Comisión de Puntos Constitucionales que crea el Sistema Nacional Anticorrupción y acusó al PAN de no aceptar propuestas de otros partidos en el tema.

 

“Del grupo parlamentario del PRI hay toda la voluntad en materia de transparencia y rendición de cuentas (…) apoyamos total y absolutamente el dictamen circulado por el presidente de la comisión, el diputado Julio César Moreno Rivera, por cierto del Partido de la Revolución Democrática (PRD)”, declaró.

 

El coordinador de Acción Nacional en la Cámara de Diputados, José Isabel Trejo, aseguró que los trabajos en este tema están detenidos, y acusó al presidente Enrique Peña Nieto de imponer el freno, “lo que buscábamos era generar un sistema que previniera, investigara y sancionara de manera efectiva la corrupción”.

 

Expresó que los integrantes de la comisión emitieron un dictamen previo, que desconoce por completo la iniciativa presentada por el PAN, “se empoderaba a un Consejo Nacional para la Integridad Pública, así se le llamaba, que estaba encabezado por el Presidente de la República y por los gobernadores, lo cual nos parecía, francamente, una simulación”.

 

Por separado, Miguel Alonso Raya, coordinador del PRD, aseguró que no existen condiciones para sacar adelante esta reforma, por lo que descartó que su aprobación se dé en este periodo ordinario que termina el lunes próximo.

 

“Hoy no hay condiciones para dictaminar el asunto de la reforma anticorrupción, requerimos tiempo para discutirla”, argumentó.

 

Explicó que el documento ventilado contiene dos temas que el PRD no avalará “de ninguna manera”; una que sea el Ejecutivo federal quien presida el organismo; y dos, que no se contemplen penas severas, como la extinción de dominio o el embargo precautorio.

 

Dictamen es una simulación: Anaya

 

El presidente nacional del PAN, Ricardo Anaya, sostuvo que el dictamen anticorrupción del PRI es una simulación y no resuelve los problemas de fondo en la materia.

 

El dirigente partidista dio cinco razones por las que su partido rechaza el dictamen: desconoce el modelo planteado por el PAN; empodera al Consejo Nacional de manera equivocada; no fortalece a la Auditoría Superior de la Federación; no consideran a los bienes adquiridos por enriquecimiento ilícito como susceptibles de extinción de dominio y porque el titular de la Secretaría de la Función Pública seguiría siendo nombrado por el Presidente sin intervención del Senado.

 

“El dictamen elaborado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) es absolutamente inaceptable, es una simulación y un engaño. No es una solución de fondo al gravísimo problema de la corrupción”, dijo el panista en rueda de prensa.

 

La propuesta del PAN para combatir la corrupción se centra en contar con un Tribunal de Cuentas que sea imparcial y autónomo, y que castigue a los corruptos; además de la necesidad de una Fiscalía Anticorrupción independiente y especializada.

 

Otros de los puntos en los que el blanquiazul no quitará el dedo del renglón es el fortalecimiento de la Secretaría de la Función Pública y la una Auditoría Superior de la Federación verdaderamente fortalecida y obligada a publicar oportunamente conclusiones y sus hallazgos en casos de corrupción.