En el segundo día de negociaciones entre México, Canadá y Estados Unidos para actualizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) prevalece el hermetismo entre los delegados comerciales, mientras que el sector automotriz espera una señal del alcance que tendrá el diálogo en este sector.

 

Hasta ahora la administración estadunidense ha dicho que desea que la producción de vehículos en Norteamérica tenga “sustancial” contenido estadunidense para estar exento de aranceles en la región.

 

Sin embargo, hasta ahora no se ha presentado una propuesta concreta. En el actual TLCAN un vehículo debe tener 62.5 por ciento de contenido de la región para ser transportado libre de arancel.

 

Algunos reportes estadunidenses sugieren que este monto debía subirse a 70 por ciento y que el contenido estadunidense debería ser de entre 35 y 50 por ciento.

 

El ministro de Innovación, Ciencia y Desarrollo Económico, Navdeep Bains, dijo antes de la tercera ronda que “esperamos que haya una propuesta concreta”, en cuanto a las reglas de origen en el sector automotriz.

 

No obstante Steve Verheul, el negociador técnico de la delegación canadiense, admitió al inicio de esta ronda tres, que no se espera nada “radicalmente nuevo”.

 

Por su parte el jefe técnico de la delegación mexicana, Kenneth Smith Ramos, se negó a hacer comentarios respecto al tono o avance de la negociación, pues “apenas estamos empezando”.

 

Jerry Dias, líder sindical de Unifor, uno de los sindicatos más grandes de Canadá, afirmó que en esta ronda tres no está habiendo discusiones importantes, e incluso señaló que “todo mundo debía irse”.

 

El dirigente sindical, quien ha estado presionando para que el gobierno canadiense busque mejores estándares laborales trilaterales, dijo este domingo en la sede de las negociaciones que “no está habiendo progreso, las cosas están yendo muy lento”.

 

Dias expresó que esto pareciera una táctica estadunidense en donde ellos son el gran jugador que impone la agenda.

 

“No creo que Estados Unidos esté siendo serio en querer alcanzar un acuerdo porque no pueden estar en una tercera ronda sin presentar algún papel”, añadió.

 

Este domingo se cumple una semana de que los dos mil 800 trabajadores de General Motors Canadá están en huelga por el traslado de operaciones de la planta Cami (Ontario) a México, que obligó a suspender 600 puestos de trabajo.

 

Entre los temas que se están discutiendo en esta tercera ronda están comercio digital, adquisición gubernamental, empresas estatales, servicios financieros prácticas regulatorias y asuntos ambientales.

 

Esta tercera ronda se está desarrollando en la sede de Global Affairs Canada, en el centro de Ottawa, con las tres delegaciones comerciales acompañadas de sus respectivos consejos de asesores.

 

aarl