El presidente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya, dijo que es inaceptable que el gobierno cierre los ojos ante la magnitud del problema de la depreciación del peso frente al dólar, ya que está provocando fuertes pérdidas cambiarias a las empresas, y se traduce en menos inversión,  generación de empleos y crecimiento económico

 

“No hay duda de que los altos precios del dólar afectan ya el crecimiento económico y la generación de empleos, y es ingenuo pensar que no se traducirán en un aumento generalizado de los precios”, dijo Anaya Cortés en un comunicado.

 

Aseguró que la economía mexicana no solamente no va bien, sino que ha tomado un rumbo francamente preocupante, pues en vez de apostarle a la inversión, que es la que genera empleos y activa la economía, el gobierno priista repite la fórmula de endeudamiento e impuestos que implementó a lo largo de 70 años, con resultados desastrosos para los mexicanos.

 

“Los altos niveles de endeudamiento en los que México se encuentra, el precio cada vez más bajo del petróleo y el desplome del peso frente al dólar, no garantizan la estabilidad del país ni el bienestar de las familias. Es urgente recortar el gasto corriente y retomar la inversión en obra pública, para que haya trabajo y el país sea productivo”, indicó.

 

Explicó que, según cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y del INEGI, en la actual administración ha aumentado en 6.8% el gasto corriente que se destina a funciones del gobierno, como sueldos, viáticos, oficinas, vehículos oficiales o celulares, mientras que el gasto de inversión del sector público, el cual detona el desarrollo económico, se ha reducido en un 13.9%. Asimismo, el gasto de obra pública del gobierno federal disminuyó en 26.8%, y la inversión en vivienda también disminuyó en 5%.

 

Sobre la deuda, el líder del PAN expresó que su nivel actual es preocupante, pues de acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, al cierre del tercer trimestre de 2015 ésta ascendía al 45% del PIB, diez puntos más que hace tres años, cuando inició el actual gobierno.

 

“De continuar así, México llegará a niveles que pondrán en duda su solvencia. En otras palabras, el actual gobierno priista gasta cada vez más en sus propias funciones, y no en incrementar la inversión pública en tiempos de incertidumbre económica, que es lo que puede detonar el desarrollo. No olvidemos que este gobierno aumentó los impuestos con la nociva reforma fiscal, y ahora además endeuda al país. Tales acciones demuestran que su único interés es sostener su propia burocracia, y que no está dispuesto a apretarse el cinturón, como hacen la mayoría de los mexicanos”, recalcó.