SAN JUAN. Varias islas del sur de Bahamas sufrieron hoy inundaciones a causa del paso del huracán Joaquín, que al alcanzar vientos máximos sostenidos de 210 kilómetros subió a categoría 4, informó el canal estatal de televisión ZNS Bahamas.

 

Sin informar por ahora de posibles víctimas, el canal indicó que en parte de las islas de Acklins, Crooked Island, Long Island y Exuma, ubicadas en el sureste del archipiélago, se registran inundaciones que dificultan la circulación de automóviles y han generado cortes de electricidad y del teléfono.

 

ZNS indicó que el servicio eléctrico está interrumpido en Acklins y que las líneas de telefonía por satélite no funcionan.

 

La compañía telefónica BTC informó a través de un comunicado de que el servicio de líneas terrestres y móviles se ha visto interrumpido en las islas de Exuma, San Salvador y Acklins debido a cortes en el suministro de electricidad.

 

El Ministerio de Turismo de Bahamas anunció que está pendiente del estado de aproximadamente 7,000 turistas -extranjeros y nacionales que se movieron a áreas más seguras- que se encuentran alojados en hoteles del archipiélago.

 

De esa cifra, 5,500 se encuentran en hoteles en Nassau y la Isla Paraíso y otros 1,500 en hoteles de Gran Bahama.

 

“Afortunadamente es temporada baja para las islas sureñas. Muchos hoteles han cerrado durante este período para hacer renovaciones y actualizar su oferta antes de abrir para la temporada de invierno”, dijo la directora del departamento, Joy Jibrilu.

 

En su boletín de las 15:00 GMT de hoy, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos señaló que el huracán estaba situado a unos 115 kilómetros al sur-sureste de la isla San Salvador y su ojo estaba atravesando la zona central del archipiélago de la Bahamas, ambos en el archipiélago de la Bahamas.

 

Los expertos advirtieron que Joaquín, un huracán de categoría 4 en la escala de intensidad de Saffir-Simpson, de un máximo de 5, puede incrementar su intensidad en la próximas 48 horas.

 

Para el próximo martes, Joaquín como tormenta tropical, podría impactar el área metropolitana de Nueva York, potencialmente siguiendo el curso destructivo del huracán Sandy en 2012.