Habitantes de la comunidad de Carrizalillo en el municipio de Eduardo Neri, Guerrero, han localizado dos fosas clandestinas con restos humanos y ropa que podrían pertenecer a algunas de las víctimas de la organización criminal Guerreros Unidos.

 

El sábado pasado se dio a conocer que localizaron la primer fosa cerca del camino a Tenantla, por el paraje del Cazahuate, donde los ejidatarios descubrieron huesos humanos al nivel de la superficie sobre una fosa de un metro de profundidad.

 

Aunque avisaron al agente del Ministerio Público y el servidor público acudió al lugar conocido como Los Cazahuates, los peritajes no iniciaron ese día, ni al otro, y fue hasta ayer que peritos de la Procuraduría General de Justicia de Guerrero iniciaron las investigaciones.

 

Ayer localizaron la segunda fosa en El Puerto, donde al parecer hay varios restos, y continuaron la búsqueda de más fosas.

 

Por ese motivo, habitantes de Carrizalillo buscaron a los familiares de los normalistas para que vayan a buscar a los estudiantes desaparecidos en esa zona donde han ubicado al menos tres sitios más con fosas en los cerros.

 

El municipio de Eduardo Neri se ubica en el área montañosa de Guerrero, en los límites con Cuilapan,  Cocula, Tixtla y Cuetzala, zona dominada por Guerreros Unidos de acuerdo con la versión de los procesados por el caso Iguala.

 

El miércoles pasado los pobladores de Carrizalillo retuvieron a Modesto Peña Celso, supuesto miembro de Guerreros Unidos. Él estaba con nueve agentes de la Policía Federal que habían “levantado” a Ricardo López García, comisario ejidal.

 

Después de tocar las campanas una turba exigió la presencia de personal de la PGR y la Marina Armada para entregar a los federales y a Peña Celso, presunto halcón del crimen organizado, indican reportes de medios locales.

 

Para ganar el apoyo de la comunidad y evitar que lo lincharan, Peña Celso confesó la ubicación de una fosa clandestina con restos humanos y dejó abierta la posibilidad de que hay más en esa zona, pero fue hasta el fin de semana que los vecinos confirmaron la información.

 

Peña Celso y los nueve policías federales quedaron a disposición del MP federal en la delegación de la PGR en Guerrero por sus presuntos vínculos con dicha organización criminal.

 

Posible destino de los 43

 

Un testigo, habitante de Carrizalillo, afirmó que el 27 de septiembre de 2014 hubo movimiento sospechoso en la zona.

 

“Arribaron un convoy de camionetas, combis, camionetas cerradas. Lo que pasó fue que había material, se iba a pavimentar la calle. Al parecer lo ocuparon. Hay la posibilidad de que hayan enterrado a los estudiantes”, mencionó en entrevista con Ciro Gómez Leyva en días pasados.

 

El testigo, quien pidió el anonimato, dijo que tienen una certeza de entre 60 y 80% de que los 43 estudiantes fueron enterrados por Guerrero Unidos en las fosas clandestinas.