La Secretaría de Hacienda aseguró que, después del incremento de 1.9 por ciento que se aplicó a los precios de las gasolinas, diésel y gas LP el día de ayer 1 de enero, ya no habrá más aumentos durante 2015.

 

Este aumento es equivalente a 26 centavos por litro para la gasolina Magna y 27 centavos tanto para la gasolina Premium así como para el diésel, para cotizarse en un precio de 13.57 pesos por litro para la primera, 14.38 pesos para la segunda y 14.20 por ciento para el último.

 

“Si bien el Ejecutivo Federal tiene la facultad legal de realizar ajustes adicionales en respuesta a fenómenos de volatilidad en los precios internacionales de los energéticos, esa facultad no se estará empleando durante 2015”, aseguró la dependencia federal en un comunicado.

 

En el caso del gas LP, su precio máximo tuvo un incremento de una sola vez equivalente también a 1.9 por ciento, que representa 23 centavos por kilogramo, y “tampoco se darán incrementos mensuales adicionales en el precio máximo de este energético, a diferencia de lo que se observaba en años previos”.

 

La dependencia que titula Luis Videgaray recordó que conforme a lo aprobado en la reforma energética, durante 2015 dejará de haber un precio único para las gasolinas y el diésel.

 

En su lugar, se establece un precio máximo, que permitirá que las familias mexicanas adquieran estos combustibles a precios por debajo de ese rango en la medida en que la competencia entre estaciones de servicio permita tarifas por debajo de ese nivel para al consumidor final.

 

Los precios máximos para las gasolinas y el diésel se mantendrán constantes en el nivel establecido al inicio del año, con lo que se eliminan los ajustes mensuales que se observaban en el pasado.

 

Así, el primero de enero se aplicó un incremento de una sola vez de 1.9 por ciento en el precio máximo de los combustibles.

 

Destacó que los incrementos de 1.9 por ciento son menores a la inflación esperada para 2015, que se ubica en un rango de 3.0 a 4.0 por ciento.

 

De esta manera, además de evitar los ajustes mensuales que se observaban de forma continua desde finales de 2009, se reducirá el precio de los combustibles en términos reales, subrayó.

 

Por otra parte, la Secretaría de Hacienda resaltó que la Reforma Energética incrementará de forma gradual la disponibilidad de gas natural para la generación de electricidad, lo que permitirá reducir las tarifas de electricidad para los usuarios de forma consistente con menores costos de generación.

 

Como resultado de lo anterior, el 1 de enero de este año se redujeron las tarifas de energía eléctrica para el sector doméstico en 2.0 por ciento, lo que contrasta con los aumentos anuales de 4.0 por ciento que se observaban en años anteriores como resultado de incrementos mensuales de alrededor de 0.33 por ciento.

 

Las medidas de precios públicos implementadas el día de ayer reflejan el objetivo de la administración federal de garantizar unas finanzas públicas sanas al mismo tiempo que se generan beneficios para los hogares mexicanos, puntualizó.

MG