Frente a la competencia que se avecina por la apertura del mercado de combustibles, agremiados a la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas) afinan un proyecto para crear su propia infraestructura de distribución y almacenaje y así independizarse de Petróleos Mexicanos o cualquier empresa.

 

“Ya tenemos el anteproyecto para poner una terminal de almacenamiento como la que tenemos propuesta ahorita de Holanda, de España, Colombia o Ecuador, que nos ofrecen el producto, tardan de tres a cuatro años en construirse”, explicó Pablo González, presidente de la asociación que agrupa a unas seis mil de las 11 gasolineras en todo el país.

 

El proyecto requiere recursos por 20 millones de dólares, y tendría una cobertura de 200 kilómetros cuadrados por lo que es posible que empresarios de tres o cuatro entidades entren como inversionistas.

 

Además, están en pláticas con las empresas constructoras para crear una asociación en la que compartan gastos y utilidades.

 

Este 1 de abril se abre el mercado a las importaciones de combustibles a particulares, un segmento que requiere mucha inversión a mediano plazo pues los interesados tendrán que construir ductos para distribuirla, lo que llevará varios años.

 

Pablo González comentó que incluso ya están en pláticas con empresas como Exxon, Texaco y Shell, entre otras, para comprarles gasolina de sus refinerías en el extranjero, las cuales están interesadas en establecer su propia red de ductos en el país.

 

La nueva marca

 

Otro jugador en este nuevo mercado es la empresa Gulf, que mediante asociaciones con inversionistas mexicanos busca abrir cuatro estaciones de servicio a mediados de junio o julio, de las 100 que planea operar a finales de este año.

 

“Queremos trabajar con una combinación de modelo de franquicia que es el que más volumen va a capturar”, dijo Sergio de la Vega, director de Gulf México.

 

Explicó que no construirán nuevas estaciones, sino que buscarán asociarse con los actuales titulares de las franquicias de Pemex, ofreciéndoles un modelo con mejores servicios.

 

La estadunidense Gulf será la primera marca de gasolineras diferente a Pemex que se instale en el país tras la reforma energética. Desde el 1 enero pasado dejó de ser obligatorio tener un contrato con Petróleos Mexicanos para operar una estación de servicio, por lo que pueden cambiar de marca si así lo deciden los dueños.

 

Preparativos para la apertura del mercado

 

Franquicitarios de Pemex

 

  • Agremiados a Amegas crean la empresa Innova Petromex para solicitar los permisos de importación, transporte, almacenaje y distribución de los combustibles.

 

  • Alistan la compra de pipas para que cada gasolinera tenga una unidad.

 

  • A mediano plazo (3 o 4 años) construirán una terminal de almacenamiento para el combustible que importen.

 

  • Para las terminales buscarán alianzas con las empresas constructoras a fin de compartir la mitad de los gastos y las utilidades.

 

  • El objetivo es dejar de depender de terceros en la cadena de venta de combustibles y formar parte del negocio completo, no sólo de las gasolineras.

 

Gulf, el nuevo jugador

 

  • No construirán ninguna gasolinera, sino que buscarán asociarse con los actuales titulares de las franquicias de Pemex.

 

  • Su oferta consiste en pagar una contraprestación para entrar al negocio y luego compartir a partes iguales gastos y ganancias.

 

  • En principio ofrecerán las mismas gasolinas de Pemex (Magna y Premium), por lo cual los precios serán los mismos; una vez que se abra el mercado tendrán otras marca. Su apuesta es atraer clientes con un mejor servicio.

 

  • Las primeras cuatro estaciones abrirán entre junio y julio en la Ciudad de México y Monterrey.

 

  • El objetivo es que en menos de cuatro años tengan 3,000 gasolineras en todo el país.