La reciente fuga de cinco peligrosos reos por la puerta principal de una cárcel de Sinaloa muestra la corrupción y la falta de preparación del sistema penitenciario estatal, reconoció el gobernador Quirino Ordaz Coppel.

 

Tras la fuga el pasado jueves de Juan José “el Negro” Esparragoza Monzón y otros cuatro internos de la prisión de Aguaruto en Culiacán, la capital de Sinaloa, el gobernador declaró a la prensa que los cinco reos salieron por la puerta principal del penal.

 

“El hecho es una muestra más clara de la complicidad y la corrupción que hay en las cárceles de Sinaloa, y pues vean la infraestructura”, dijo Ordaz, del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

 

Además aseguró que el sistema penitenciario que recibió el pasado 1 de enero de su predecesor Mario López Valdez, del Partido Acción Nacional (PAN), está en una situación caótica.

 

“Lo que pasó que es una muestra de la debilidad del sistema penitenciario, del rezago que hay, la corrupción que existe, la complicidad que se hizo patente, y eso es a lo que le tenemos que dar la vuelta. Los penales se recibieron en condiciones caóticas”, enfatizó.

 

También denunció que los centros de reclusión del estado no están preparados para atender a reos federales de alta peligrosidad. En la penitenciaría de Culiacán hay 500 reos del orden federal de una población de más de 2.220, de los que más de 90 son de alto riesgo.

 

“No estamos preparados para atender a reos federales de alta peligrosidad. Hicimos la solicitud en su momento a las autoridades federales para que fueran trasladados a penales de alta seguridad; para eso fueron creados”, comentó.

 

Los reos evadidos son Juan José Esparragoza Monzón; Alfonso Limón Sánchez, alias “Limón”; Jesús Peña González, “el Veinte”; Rafael Guadalupe Félix Núñez, alias “Changuito Ántrax”, y Francisco Javier Zazueta Rosales, “Pancho Chimal”.

 

El viernes pasado el Consejo de la Judicatura Federal confirmó que Esparragoza Monzón tenía un amparo en contra de su traslado a otra prisión debido a que no había una orden de un juez que solicitara ese movimiento.

 

Destacó que la orden de traslado objetada en el juicio de amparo era de autoridades administrativas “y no de un juez federal, lo que permitió considerarla como un acto fuera de procedimiento que afecta la libertad personal”.

 

Ese mismo día, la Procuraduría General de la República (PGR) abrió una investigación por la fuga de Esparragoza Monzón, hijo del capo Juan José Esparragoza Moreno, “El Azul”, y los otro cuatro reos.

 

Las autoridades consideran a “el Negro” Esparragoza como operador financiero del Cártel de Sinaloa, que su padre fundó junto con Joaquín “El Chapo” Guzmán, quien fue extraditado a Estados Unidos el pasado 19 de enero para enfrentarse a varios cargos por narcotráfico.

 

Además lo señalan como responsable de coordinar una red de distribución de droga y de invertir los recursos financieros del cártel en bienes y empresas en varios estados mexicanos.

 

Su padre, “El Azul”, es buscado por autoridades de México, donde se ofrece una recompensa de 30 millones de pesos (1,55 millones de dólares), y de Estados Unidos, que tienen una oferta de cinco millones de dólares por información que lleve a su captura.

 

jram