RÍO DE JANEIRO. La policía brasileña desarticuló, tras un intenso tiroteo, una banda de narcotraficantes que operaba en la Rocinha, la mayor favela de Río de Janeiro, que fue “pacificada” en 2011 por las autoridades.

 
Al menos seis supuestos narcotraficantes fueron arrestados ayer y otros catorce integrantes de la banda ya habían sido detenidos en operaciones previas, realizadas en los últimos ocho meses.

 

La justicia expidió órdenes de captura contra otras 31 personas, que están consideradas forajidas, según informaron portavoces de la Policía Civil en una rueda de prensa.

 

El operativo de grandes proporciones contó con la participación de 120 agentes, que fueron recibidos a tiros cuando irrumpieron en la favela a la hora del amanecer.

 

Un helicóptero de la Policía que apoyaba la operación recibió un balazo en una pala de la hélice y se vio forzado a aterrizar, sin que sus ocupantes resultasen heridos.

 

Aunque la Policía tomó el control de la Rocinha a finales de 2011, en el marco de la política de “pacificación” de las favelas, una banda de narcotraficantes continuaba operando en la zona y protagonizó diversos enfrentamientos con las autoridades en los últimos años.

 

La Rocinha es considerada la mayor favela de Río de Janeiro, con cerca de 80 mil habitantes, y es la más emblemática de la ciudad brasileña, puesto que está ubicada en la falda de un monte entre dos de los barrios más adinerados, Leblon y São Conrado.

 

En otra operación similar, la Policía arrestó hace dos semanas a 26 supuestos integrantes de una banda de narcotraficantes que seguía operando en el Complexo do Alemão, un conjunto de favelas de Río de Janeiro conquistado por las autoridades en 2010.