México y Estados Unidos sentaron ayer las bases para crear una frontera más abierta y expedita para el comercio bilateral, que buscará crear corredores trasnacionales que conecten los mercados de productos mexicanos con los mercados de consumidores estadunidenses y que abre la posibilidad de que se construyan nuevos puentes fronterizos, informaron ayer funcionarios gubernamentales.

 

El concepto de corredores, que fue planteado originalmente por negociadores mexicanos durante los encuentros con sus contrapartes estadunidenses durante la preparación del encuentro presidencial entre Enrique Peña Nieto y Barack Obama, profundizará el marco creado por el Tratado de Libre Comercio, que se irá construyendo a partir del grupo de alto nivel ministerial que se acordó ayer.

 

Los presidentes Peña Nieto y Obama se reunieron durante una hora y 40 minutos en el Palacio Nacional, en donde dieron luz verde a un paquete de 26 documentos que englobaron los temas de discusión bilateral que fueron anunciados de manera general en el comunicado conjunto, cuyo contenido es fundamentalmente económico.

 

El comunicado conjunto establece la importancia de buscar una exitosa conclusión de la negociación del Acuerdo Estratégico Transpacífico de Asociación Económica, para fortalecer el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Así, se abrirá una mesa de diálogo económico de alto nivel, en el que está incluido el vicepresidente estadunidense Joe Biden.

 

Se acordó trabajar por una frontera segura, ágil y exitosa. Asimismo, se creará un grupo de trabajo binacional a favor de las pequeñas y medianas empresas.

 

Finalmente, el presidente Enrique Peña Nieto habló sobre el ambiente de madurez y civilidad de nuestra democracia al suscribirse el Pacto por México.

 

“Con gran respeto entre nosotros, entre las fuerzas políticas y el gobierno de la República, hemos logrado establecer una agenda de trabajo que permita impulsar las reformas transformadoras y estructurales que permitan que México acelere su desarrollo”, dijo.

 

Durante las pláticas, de acuerdo con funcionarios gubernamentales, se arrancó el grupo de alto nivel que sostendrá su primer encuentro ministerial en otoño, y que revisarán la propuesta de los corredores mexicanos, que es una opción que daría velocidad a una integración más profunda a través de un diseño de fronteras más abiertas.

 

El presidente Obama, sin entrar al detalle de lo platicado por las dos delegaciones, dijo: “Acordamos seguir haciendo de nuestra frontera algo más eficiente, con más infraestructura, mejores tecnologías para que sea más fácil comerciar juntos”.

 

“Y, también, reafirmamos nuestro objetivo de concluir negociaciones en la Asociación Transpacífica este año que será otro paso importantísimo para integrar nuestras economías y colocarnos en posición de competir en los mercados más acelerados del mundo, en Asia para poder vender más productos mexicanos y estadunidenses. Y, si lo hacemos juntos, podemos trabajar aún mejor”.

 

Los presidentes hablaron de potenciar la energía hidroeléctrica que se produce en Baja California para ampliar los suministros en California. “Reafirmamos nuestra dedicación a las asociaciones de energía limpia para combatir el cambio climático”.

 

Hidrocaurburos

 

En materia energética, Barack Obama dio la bienvenida a las medidas que el Congreso de Estados Unidos ha tomado recientemente hacia la aplicación del Acuerdo Transfronterizo de Hidrocarburos, que fue diseñado para mejorar la seguridad energética de América del Norte.

El acuerdo, recordó ayer el gobierno estadunidense, establece un proceso de cooperación para la gestión del desarrollo de los yacimientos de petróleo y gas que cruzan la frontera marítima internacional entre los dos países en el Golfo de México.

En ese sentido, acordaron iniciar estudios para determinar la posibilidad presentada por México para construir troncales a los gasoductos de ambos países que llegan a la frontera, de tal forma que la red de gasoductos mexicanos y estadunidenses quede totalmente conectada.

 

Es el caso del gasoducto Los Ramones, un proyecto estratégico que pretende solucionar el desabasto de gas natural en México, e iniciará operaciones en diciembre de 2014.

 

“Los Ramones, uno de los seis gasoductos a construir en el país, será levantado en dos fases, siendo la primera que correrá de la frontera norte de Tamaulipas a Los Ramones, Nuevo León, y la segunda hasta Apaseo el Alto, Guanajuato”, explicó Petróleos Mexicanos (Pemex).

 

“Las obras de infraestructura energética de la magnitud de Los Ramones no se han realizado en el país desde hace más de 50 años”, aseguró el organismo público dirigido por Emilio Lozoya Austin.

 

Los avances y modificaciones del gasoducto fueron dados a conocer al Consejo de Administración de Pemex durante una sesión extraordinaria celebrada el 16 de enero de 2013.

 

Pemex previó que los cambios realizados al proyecto de Los Ramones permitirán reducir los tiempos de construcción de la primera fase, cuyo inicio de operación se adelantará al menos tres meses, entrando en operación el 1 de diciembre de 2014.

 

Destacó que con Los Ramones se busca solucionar los retos urgentes que se enfrentan en materia de abasto de gas natural y contribuirá a un suministro eficiente y a precios competitivos del combustible.

 

La segunda fase del proyecto se realizará a través de un esquema de licitación pública, del cual no se dio más detalle, ni cuándo será presentada, agregó la paraestatal.

 

Otro proyecto es desarrollado desde Arizona, Estados Unidos, para abastecer de gas natural a Sonora, Sinaloa y Chihuahua.

 

La primera etapa del gasoducto se construirá de Tucson, Arizona, a la frontera de El Sásabe, ubicada al noroeste de Sonora, y de ahí la Comisión Federal de Electricidad (CFE), con el apoyo de empresas privadas, lo conectará hasta el sur de Sonora.

 

Sempra Energy, ahora IEnova, construirá los tramos del gasoducto desde El Sásabe hasta Guaymas y de Guaymas a El Oro, Sinaloa.

 

“El gasoducto acordado entre Pemex y Mitsui correrá de Tucson a Sásabe, en la frontera de Estados Unidos y México. En este punto se conectará con los tramos Sásabe-Guaymas y Guaymas -El Oro, a construir por IEnova (antes Sempra México) y con el tramo El Oro- Mazatlán, a construir por TransCanada”, explicaron fuentes de la industria.

 

Los acuerdos

 

1. Diálogo económico de alto nivel.

 

2. Acciones conjuntas para desarrollar una frontera segura, en el marco del compromiso asumido para tener la frontera de siglo XXI.

 

3. Creación de un grupo de trabajo binacional, para apoyar a los emprendedores de ambos países, y con ello impulsar la pequeña y la mediana empresa.

 

4. Creación de un foro bilateral sobre educación superior, innovación e investigación, que permita reunir a dos entidades gubernamentales; a Conacyt y a la Fundación Nacional de Ciencia de los Estados Unidos.

 

5. Colaboración contra la delincuencia organizada transnacional, los flujos financieros ilegales y el tráfico de armas, y en las medidas para reducir el consumo de drogas y sus consecuencias.