BOGOTÁ. Las guerrillas de las FARC iniciaron hoy un cese al fuego y de hostilidades unilateral por tiempo indefinido en todo el territorio colombiano, una decisión que se enmarca dentro de las negociaciones de paz que el grupo rebelde adelanta con el gobierno colombiano.

 

El grupo insurgente en su declaración de cese al fuego sostuvo que con esta tregua unilateral buscan que el gobierno colombiano decrete un armisticio para avanzar al fin del conflicto que lleva más de 50 años con cerca de siete millones de víctimas.

 

Este cese de fuego unilateral, “que deseamos se prolongue en el tiempo, se daría por terminado solamente si se constata que nuestras estructuras guerrilleras han sido objeto de ataques por parte de la fuerza pública”.

 

“Es nuestro anhelo que el pueblo soberano asuma también y de manera protagónica esta veeduría, dado que con ella se busca el beneficio de la patria lacerada y un homenaje a las víctimas de ayer y de hoy”, señaló el grupo rebelde.

 

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) pidieron que el cese al fuego y de hostilidades fuera verificado por organismos internacionales, como las Naciones Unidas, UNASUR, CELAC y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), lo que fue rechazado por el presidente Juan Manuel Santos.

 

El mandatario sostuvo que la obligación constitucional de la Fuerza Pública es garantizar la seguridad en todo el territorio nacional, y abogó para que el acuerdo final de paz se logre en el corto plazo en La Habana.

 

La decisión del grupo rebelde fue destacada por la comunidad internacional, la Iglesia católica, partidos políticos oficialistas y la izquierda, así como las organizaciones defensoras de derechos humanos.

MG