El presidente de Bolivia, Evo Morales, cumplirá este domingo su undécimo año consecutivo de gobierno, uno de los peores que ha tenido por problemas personales, políticos y económicos, pero con la decisión de poder gobernar hasta el 2025.

 

En una sesión del Parlamento en La Paz, el mandatario dará el domingo un mensaje en el que, según ha anticipado, destacará los cambios que ha promovido con una comparación de sus once años de gobierno con los 181 años previos de la historia boliviana.

 

También tiene previsto iniciar un nuevo año de gestión con colaboradores que representarían un cambio generacional en el Consejo de Ministros, aunque no está claro si se tratará de un nuevo equipo técnico o político o una mezcla de ambos factores.

 

En teoría será un equipo pensado para tratar de resolver todos los problemas que golpearon el año pasado a su Gobierno y en la perspectiva de lograr habilitar al mandatario como candidato para que en 2019 busque un cuarto mandato consecutivo hasta el 2025.

 

Las dificultades afrontadas en 2016 van desde la corrupción en un fondo para proyectos indígenas, la ineficacia en las previsiones ante la crisis del agua que vive La Paz, la caída de los precios del gas natural y los problemas detectados en el sector aeronáutico con el accidente del avión de la aerolínea boliviana Lamia.

 

Pero el peor de todos fue la derrota sufrida en el referendo del 21 de febrero pasado, en el que un 51,3 % de los bolivianos rechazó reformar la Constitución para que Morales vuelva a ser candidato en 2019 y fue el primer revés electoral del mandatario en diez años.

 

Aunque la Constitución permite solo dos mandatos consecutivos, Morales pudo concurrir a los comicios de 2014 con aval del Tribunal Constitucional y los ganó para tener su actual tercer periodo, que debe concluir el 22 de enero de 2020.

 

En octubre de 2015, el gobernante se convirtió en el mandatario boliviano con más años continuos en el poder, tras rebasar el récord de nueve años, ocho meses y 26 días continuos de Gobierno que tenía el militar Andrés de Santa Cruz (1829-1839).

 

Aunque el mandatario había asegurado que respetaría los resultados de la consulta constitucional de febrero del 2016, ahora el oficialismo promueve nuevamente su candidatura barajando una serie de opciones para habilitarlo en 2019.

 

El principal argumento oficialista fue que la población votó engañada debido a una “guerra sucia” promovida por la oposición y Estados Unidos para desprestigiar al Gobierno.

 

El analista político Jorge Lazarte dijo a Efe que “el cierre de un ciclo de expansión económica acelerada” por la caída de los precios de las materias primas y la derrota en el referendo fueron los mayores problemas sufridos por la Administración de Morales.

 

“La conjunción de ambos ha hecho perder la cabeza al Gobierno. Ha sido un golpe tan contundente que lo tiene atolondrado hasta ahora”, dijo Lazarte, para quien el oficialismo está en su “peor momento”.

 

La derrota en el referendo mostró los flancos débiles del Gobierno” y “la vulnerabilidad en la que puede encontrarse” tras los varios años de seguridad en el poder, agregó.

 

“Y para mirar con menos pesimismo su propio futuro, ellos están dándose a la tarea de buscar vías que les permitan quedarse cada vez más tiempo en el poder”, indicó.

 

Entre las vías que analiza el partido de Morales para habilitarlo figuran el convocar a otro referendo por iniciativa ciudadana o mandato parlamentario, una consulta al Tribunal Constitucional y la dimisión del presidente meses antes de terminar el mandato.

 

De todas las opciones, el oficialismo defiende que el último es el camino más corto y menos burocrático, pero los analistas y la oposición consideran que se trata de un “absurdo” porque cualquier gobernante podría renunciar en la víspera de concluir su mandato para alegar que no lo ha cumplido y así buscar otra reelección.

 

Hace unos días, Morales pidió a los periodistas que no le pregunten “nunca más” sobre el tema, pero sus partidarios no han dejado de hablar de la perspectiva de gobernar hasta el 2025.