CHICAGO.  Fiscales federales divulgaron documentos de la negociación de cargos con dos testigos en una confabulación de narcotráfico por un valor de mil millones de dólares en que supuestamente participó el capturado narco Joaquín “El Chapo” Guzmán.

 

Los documentos presentados en Chicago sobre los hermanos mellizos Pedro y Margarito Flores, del cártel de Sinaloa, se dieron a conocer horas antes que un supuesto lugarteniente de Guzmán sea sentenciado en el mismo caso.

 

Alfredo Vásquez Hernández se declaró culpable este año y las principales pruebas en su contra salieron de los dos hermanos.

 

Los documentos indican que los hermanos se declararon culpables en secreto en 2012. Entre las cosas a que renunciaron estaba un carro de lujo Bentley, 400 mil dólares en joyas y 3.5 millones de dólares en ganancias ilícitas.

 

Los hermanos tenían acuerdos con Guzmán para distribuir drogas en Estados Unidos —con Chicago como centro operativo_, pero los dos comenzaron a cooperar en secreto con agentes federales estadunidenses en 2008.

 

Hernández era un amigo cercano de Guzmán que empleó sus habilidades logísticas para enviar toneladas de heroína y cocaína por tren de México a Chicago, ocultas en envíos fraudulentos de muebles, según los Flores.

 

Sin embargo, los abogados de la defensa acusan a los hermanos de exagerar la categoría de Hernández en el escalafón para ganarse el favor de la fiscalía y conseguirles una condena menor.

 

En un documento judicial reciente, los abogados defensores dijeron que los hermanos Flores “tienen todos los incentivos” para inculpar a Vásquez Hernández.

 

Los gemelos intentaron embaucar a los agentes federales incluso después de acceder a cooperar, dijeron.

 

Los hermanos afirman que para 2007 habían vendido hasta dos toneladas de cocaína sólo en Chicago. También suministraban a otras ocho ciudades, como Nueva York, Los Ángeles y Washington D.C.

 

En declaraciones reveladas hace poco, los Flores dijeron saber que habría asesinos que intentarían matarlos a ellos y a sus familias si el cártel descubría dónde se les custodiaba bajo protección.

 

Otro acusado encarcelado en Chicago, Vicente Zambada, afirmó en 2011 que Estados Unidos había concedido inmunidad a miembros del Cártel de Sinaloa a cambio de información sobre cárteles rivales. Un juez federal afirmó que no había pruebas para sostener esa acusación.

 

GH