WASHINGTON. El secretario de Seguridad Nacional de EU, Jeh Johnson, anunció la creación de tres grupos operativos en la frontera con México como parte de un nuevo plan para fortalecer la seguridad en el límite sur del país, ante una posible nueva crisis migratoria como la ocurrida este verano.

 

En una conferencia en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS) de Washington, Johnson insistió en que la situación, tanto en flujo de inmigrantes como en infraestructura, ha mejorado notablemente en los últimos años.

 

Sin embargo, el titular de Seguridad Nacional subrayó su compromiso y el del presidente estadunidense, Barack Obama, con una mejor preparación ante una situación como la generada hace unos meses.

 

“Aunque lo peor ha pasado por ahora –desde el pico de este verano y el más alto de la inmigración ilegal hace 15 años-, el presidente y yo estamos comprometidos a construir una frontera más segura y una estrategia inteligente para llegar allí”, dijo el secretario.

 

Los tres nuevos grupos de trabajo que velarán por la seguridad de la frontera se dividirán de manera geográfica para dirigir los recursos de la Patrulla Fronteriza, la Guardia Costera y La Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE, por su sigla en inglés).

 

Se creará así una Fuerza Operativa Conjunta para el Este, otra para el Oeste, y una tercera destinada a dotar de apoyo a las otras dos y centrada en labores de investigación e inteligencia.

 

“Estos esfuerzos nos permitirán ser más eficaces, más eficientes y más unificados en materia de seguridad nacional y fronteriza a través de nuestra frontera sur”, insistió Johnson.

 

Mientras otras agencias gubernamentales han visto recortados sus presupuestos, la Patrulla Fronteriza ha visto incrementados sus recursos y es una de las más grandes del país, con un presupuesto de 35 mil millones de dólares, 23 mil empleados federales y casi 21 mil agentes, “con el mejor nivel de equipamiento y tecnología”.

 

“Gran parte de la migración ilegal -recordó- es estacional. El aumento en la migración que vimos este verano podría regresar. La pobreza y la violencia, que son los ‘factores de empuje’ en Honduras, Guatemala y El Salvador, siguen existiendo. Y la economía de este país, un factor de atracción, es cada vez mejor”.

 

Por ello, explicó el secretario de Seguridad Nacional, “construir vallas no es suficiente”, y la Administración se está centrando en desarrollar un plan sobre las zonas de riesgo, que incluye labores de inteligencia, observación y vigilancia.

 

“Sabemos -subrayó- dónde están las áreas de riesgo. Tenemos que centrarnos en estas áreas. Y si las zonas de riesgo comienzan a moverse a otro lugar, llegaremos allí primero”.

 

Estados Unidos vivió este verano una de las crisis migratorias más duras de las últimas décadas con la llegada en avalancha de decenas de miles de niños no acompañados provenientes de esos tres países de Centroamérica.

 

En un esfuerzo conjunto, también con las autoridades de sus lugares de origen, el Gobierno estadounidense consiguió reducir el número de menores que cruzaban la frontera y atenuar lo que fue considerado como una crisis humanitaria. DE