WASHINGTON. Estados Unidos perdió una batalla con Canadá y México sobre el etiquetado de la carne y consultará al Congreso y al público interesado sobre sus próximos pasos, dijo el lunes un funcionario de la Oficina del Representante de Comercio estadunidense (USTR, por sus siglas en inglés).

 

Tim Reif, abogado jefe de la USTR, dijo que estaba desilusionado con la decisión de la Organización Mundial del Comercio (OMC) de confirmar un dictamen previo de que las reglas de etiquetado del país de origen (COOL) discriminaban ilegalmente al ganado importado, rechazando una apelación.

 

La OMC falló en contra de las etiquetas que EU ha estado colocando en la carne empaquetada de distintos cortes, donde especificaba el país donde nació, se crió y se sacrificó al animal.

 

La oficina de la Representación Comercial de Estados Unidos dijo el lunes que la OMC rechazó la apelación final de Estados Unidos, al decidir que las etiquetas estadunidenses de “país de origen” colocan en desventaja al ganado de México y Canadá.

 

El gobierno de Obama ya ajustó las etiquetas para intentar cumplir con las obligaciones impuestas por la OMC. El secretario de Agricultura, Tom Vilsack, había dicho que si la OMC fallaba en contra de la apelación de Estados Unidos, el Congreso tendría que intervenir para evitar represalias de las dos naciones vecinas.

 

La decisión también representó una victoria para la industria estadunidense de la carne, que ha expresado que las etiquetas eran una carga adicional y fueron a las cortes para impugnarlas.

 

La medida abre la puerta a sanciones comerciales contra Estados Unidos, pero legisladores estadunidenses señalaron que planean derogar las leyes que exigen a las minoristas de alimentos informar del país de origen de la carne.  (Con información de Reuters y AP)  DM