La Casa Blanca endureció hoy su lenguaje ante la crisis creada por la llegada masiva de niños centroamericanos a la frontera sur de Estados Unidos, al asegurar que la “mayoría” de ellos no cumplirá los requisitos para permanecer en el país por motivos humanitarios y serán deportados.

 

“Si no cumplen esos requisitos (para permanecer como refugiados), serán enviados de vuelta” a sus países dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.

 

Es por esta situación que la división de Comunicación visual de la Oficina de Asuntos públicos de Aduanas y Protección fronteriza de Estados Unidos lanzó una campaña de alerta en español dirigida a migrantes centroamericanos.

 

Será un anuncio que se hará público para los habitantes de El Salvador para informar y alertar sobre los peligros que enfrentan en su camino a la nación americana.