El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, hizo un llamado a China para dirigir en conjunto una iniciativa global contra el calentamiento global; aseguró que el país asiático debe compartir esta responsabilidad al ser el principal emisor de contaminantes a nivel mundial.

 

Obama aseguró que las consecuencias del cambio climático, como la alta incidencia de desastres naturales, ya alcanzaron a esta generación.

 

“Las dos economías más importantes del planeta, y las más contaminantes, tenemos una responsabilidad especial para aceptar este liderazgo”, enfatizó Obama durante la Cumbre sobre Cambio Climático 2014 de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

 

Sobre este tema el presidente estadunidense sostuvo una reunión con el vice premier chino, Zhang Gaoli, quien a su vez anunció la creación de un nuevo plan para reducir las emisiones contaminantes, que entrará en vigor a partir de 2020, así como una contribución de seis millones de dólares para impulsar la cooperación ambiental con países al sur de Asia.

 

“China está lista para trabajar con otros países y aceptar responsabilidades para construir un mejor futuro para la humanidad”, aseguró Zhang Gaoli en su discurso.

 

El presidente Obama indicó que tan sólo este año se registró el verano más caluroso de la historia en Estados Unidos; la temporada más larga de incendios forestales; así como la sequía más prolongada en la historia en el centro de su país, además, recordó el desastre causado por el huracán Sandy, que inundó Nueva York en 2012.

 

El mandatario destacó que estos son riesgos que incluso “definirán el contorno del siglo más dramáticamente que ningún otro”, en referencia a la amenaza del Estado Islámico en Siria e Irak, el brote de Ébola en África, entre otros riesgos que amenazan la estabilidad mundial.

 

“Somos la primera generación en sentir los efectos del cambio climático y la última que todavía puede hacer algo al respecto”, enfatizó.

 

Obama anunció durante la cumbre que asistirá a economías en vías de desarrollo a crear un plan que permita alcanzar la reducción de emisiones planteada para 2020. Desde el año pasado, Estados Unidos anunció una legislación para recortar las emisiones de sus plantas de carbón a través de su agencia de protección ambiental

 

El factor chino

 

En la década pasada, China se mostró reticente a reducir las altas emisiones de dióxido de carbono producidas por sus plantas de carbón, las cuales generan el 65% de su energía eléctrica a un bajo costo y que fueron esenciales para la expansión industrial de ese país.

 

En los últimos años, el gigante asiático ha realizado significativos esfuerzos para reducir esta dependencia con una mayor producción de energía solar, gas natural, plantas eólicas, hidroeléctricas y nucleares, sin embargo continúa siendo la nación más contaminante, al consumir casi el 50% del carbón en el planeta.

 

China tiene el potencial tecnológico para reducir emisiones al producir los paneles solares más baratos a nivel mundial, además de contar con un acuerdo de 400 mil millones de dólares con Rusia para asegurar su suministro de gas natural para los próximos 30 años.