El hombre que fue acusado de asesinar a tiros a sus tres hijos en una finca de San Miguel de Allende, Guanajuato, fue llevado a juicio donde enfrentará los cargos de homicidio en grado de parentesco, posesión de armas y drogas.
Este martes se llevó a cabo la audiencia, misma que por tercer día consecutivo fue declarada privada, ante la petición de la defensa de Antonio “N”, quien alega que los menores de 4, 8 y 11 años de edad murieron durante el enfrentamiento a balazos entre el inculpado y fuerzas de seguridad. La defensa agregó que solicitará la duplicidad del término constitucional para tener oportunidad de aportar más pruebas.
Este martes, fue el Ministerio Público quien pidió a la jueza que no entraran los medios de comunicación.
Hasta el momento, lo que se ha señalado es que ya se presentaron las pruebas por parte de la Procuraduría de Justicia, en la que incluye el peritaje de las ojivas, localizadas en los cuerpos de los tres menores, y la versión supuestamente grabada que tendrían cuando entrevistaron a la mamá de los pequeños.
Por otro lado, la defensa va a solicitar la duplicidad del término constitucional para poder aportar más pruebas de inocencia.
En torno a este caso, el pasado miércoles, la Procuraduría investigaba a un grupo de delincuentes que operaba en la zona, los cuales tenían secuestrados a dos niños, de 10 y 18 años.
Fueron ubicados en Dolores Hidalgo, a 25 kilómetros de donde perdieron la vida los tres niños este fin de semana.
Desde ese día, agentes tácticos estaban tratando de localizar a integrantes de la célula criminal. De acuerdo con información recabada, los agentes recibieron un reporte el pasado sábado, respecto a que en una finca estaban otros integrantes de la célula criminal.
Los efectivos llegaron en avanzada a la zona, lugar en donde supuestamente fueron recibidos a balazos; luego de pedir apoyo al Ejército, lograron entrar.