José Antonio Torres Marrufo, uno de los brazos derechos de Joaquín El Chapo Guzmán, interpuso una queja ante un tribunal colegiado, ya que el amparo promovido contra la extradición fue enviado al Juzgado donde ya le habían negado la protección de la justicia por la misma causa.

 

El Jaguar o El Marrufo es coacusado en diversos procesos judiciales en la Unión Americana en contra de Guzmán Loera, entre ellos, el de haber secuestrado y ejecutado a un ciudadano estadounidense.

 

La queja quedó radicada el pasado 29 de mayo ante el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Penal, en contra del Procedimiento Especial de Extradición 2/2012-V, por lo cual se decretó la suspensión del acto reclamado.

 

El pasado 20 de enero el quejoso interpuso el juicio 68/2014 radicado en el Juzgado Sexto de Distrito de Amparo Penal, quien declinó competencia a su homólogo del Juzgado Octavo, quien recibió el expediente el 13 de abril pasado.

 

La decisión de impugnar la declinación de competencia, es por el antecedente del sobreseimiento de un amparo tramitado por Torres Marrufo en el 2012 por las mismas causas ante dicho juzgado, lo que obligó a la defensa del procesado a interponer una queja y recurso de revisión, por lo cual, actualmente hay una suspensión de su inminente traslado a los EU.

 

A pocos meses de su detención en la ciudad de León en Guanajuato, el nueve de mayo del 2012, El Jaguar promovió el primer amparo en contra de la orden de extradición el cual quedó radicado en el expediente 442/2012.

 

Sin embargo, en aquella ocasión el juez Octavo de Distrito, sobreseyó la causa al considerar que la orden de detención provisional con fines de extradición activada en marzo de 2012 era procedente por el cambio de su situación jurídica.

 

El procesado, promovió otro juicio de garantías, el 20 de enero pasado, registrado bajo el expediente 68/2014, cuando fue autorizado su traslado a Estados Unidos.

 

Como se recordará el sábado 7 de mayo de 2010 un “comando de la muerte”, presuntamente encabezado por El Marrufo, entró en la iglesia de la Misericordia, en Ciudad Juárez, Chihuahua, y secuestró al ciudadano estadounidense Rafael Morales Valencia, en el momento en que contraía nupcias.

 

Tres días después, el hombre de 29 años apareció muerto en una camioneta junto con su hermano Jaime y su tío Guadalupe también secuestrados en el templo donde una persona fue asesinada por los sicarios durante su escapatoria.

Este es uno de los eventos por los que una Corte de Distrito del Distrito Oeste de Texas, con sede en El Paso, integró un expediente contra El Chapo Guzmán, con base en el cual lo exige en extradición.

 

El otro caso es el del secuestro de un estadounidense en Texas, a quien se le responsabilizó de haber perdido un cargamento de 300 kilos de mariguana que debería pasar a EU ocultos en los ejes de un camión.

 

De acuerdo con lo inscrito en el expediente criminal EP12CR0849, El Chapo Guzmán y 21 personas más, entre ellas Ismael Zambada, El Mayo, deben ser procesados por diversos delitos, entre ellos:

 

“Conspiración para importar y distribuir sustancias controladas ilegales, lavado de dinero y conspiración para cometer asesinato; así como preservar y proteger el poder, el territorio y las ganancias del Cártel a través del uso de la intimidación, la violencia, amenazas, secuestro, tortura y asesinato”, entre otros.

 

De acuerdo con los expedientes del caso, el propósito principal del Cártel de Sinaloa era traficar con grandes cantidades de cocaína, marihuana, entre otras drogas, a EU para su distribución.

 

Dicha labor era realizada a través de los grupos delictivos: Artistas Asesinos y Gente Nueva, las cuales peleaban el territorio al cártel de Juárez, de Vicente Carrillo, cuyos brazo armado son las pandillas La Línea y Barrio Azteca.

 

La acusación destaca el liderazgo de José Antonio Torres Marrufo –detenido en febrero de 2012 en México–, quien había sido designado por El Chapo como Jefe regional y cabeza de los “escuadrones de la muerte” del Cártel de Sinaloa.

 

Según la acusación, fue el propio Torres Marrufo quien ordenó el secuestro y ejecución de estadounidenses, entre ellos Rafael Morales Valencia, a quien ubico con el pago mil pesos a un joven de 22 años quien sugirió que lo encontrarían fácilmente: en la ceremonia de su Boda, a la cual difícilmente faltaría.