En el Distrito Federal, los responsables de las grandes edificaciones todavía no están obligados a presentar ante el Instituto para la Seguridad de las Construcciones el proyecto estructural que garantice la seguridad de los inmuebles, así lo señaló Renato Berrón, director del organismo.

 

Dentro de la ley del Instituto para la Seguridad de las Construcciones se incluye como una de sus actividades la revisión de los proyectos de inmuebles; pero ninguna empresa o persona física ha recurrido a la dependencia, pues aún no se necesita de un permiso  o una certificación de la seguridad en los proyectos para que éstos se edifiquen.

 

Lo anterior ha provocado que haya omisiones y malas interpretaciones del Reglamento de Construcciones del DF, lo que trae como consecuencias casos como el de los deslaves ocurridos en Santa Fe.

 

“Por ejemplo, si esto hubiera sido obligatorio hace 15 o 20 años, igual nos hubiera tocado esta casa habitación de Vista del Campo”, explicó.

 

El funcionario detalló que el talud de Santa Fe fue hecho por el hombre y, bajo esa lógica, requería forzosamente que desde su construcción tuviera protecciones, cosa que no se hizo.

 

La última modificación realizada al Reglamento de Construcciones del DF ocurrió en 2004. Los cambios obedecen a la adaptación de las edificaciones a las nuevas tecnologías, la sustentabilidad y a hechos que dejen al descubierto problemáticas de los inmuebles, como los sismos.

 

Renato Berrón aseveró que ya hay un nuevo Reglamento donde se incluye la obligatoriedad para que todas las construcciones presenten su proyecto estructural; sin embargo, las reformas aprobadas desde hace año y medio no se han publicado, actualmente la ley se encuentra en la Consejería Jurídica del DF.

 

La revisión del proyecto estructural implicaría un costo para los desarrolladores, precio que variará dependiendo de la extensión y de la complejidad del edificio. El promedio será de aproximadamente 40 pesos por metro cuadrado.

 

“Los desarrolladores tendrían que venir al instituto y asumir el costo, porque para la revisión del proyecto estructural se contrata a un especialista para que haga la revisión numérica profunda y, mientras no estén obligados, seguramente no lo querrán asumir”, dijo.

 

Actualmente, la responsabilidad de vigilar que los edificios cuenten con las medidas de seguridad necesarias corre a cargo de los Directores Responsables de Obra, quienes son los primeros acusados cuando se detecta alguna irregularidad.

 

Félix Villaseñor, presidente de los Directores Responsables de Obra del DF (DRO), señaló que las revisiones que realice el Instituto para la Seguridad de las Construcciones, una vez que se publique el reglamento, serán adicionales a las que ya se hacen en los edificios.

 

Cuando sea obligatorio para los encargados de las obras presentar las medidas de el proyecto estructural, la responsabilidad de las edificaciones recaerá en los propietarios  y no sólo en los DRO, como ocurre actualmente.

 

“Así ya no quedaría sólo en la cancha del director responsable de obra la responsabilidad de los edificios, también va a quedar en la cancha de los constructores y en la cancha de los proyectistas, de los supervisores y de los coordinadores”, dijo.