Empresas en todo el mundo están en alerta máxima para incrementar la seguridad informática con el fin de no ser doblegadas por piratas cibernéticos como los que ejecutaron un dramático ataque a Sony Pictures Entertainment.

 

El ciberataque, del que investigadores creen estaría vinculado a Corea del Norte, culminó con la cancelación de la película “The Interview” de Sony y a la larga podría costarle al estudio de cine cientos de millones de dólares.

 

El ataque incluyó amenazas terroristas y estuvo enfocado en causar importante daño a la empresa, en lugar de robar información de los clientes para cometer fraudes como sucedió con las tiendas Home Depot y Target, lo cual indica que ha surgido toda una nueva frontera en seguridad informática. Repentinamente, cualquier compañía podría ser blanco de ciberextorsión.

 

“El ataque a Sony es una verdadera llamada de atención incluso después del año de megafugas de datos que hemos visto”, dijo Lee Weiner, vicepresidente de productos e ingeniería de la firma de seguridad Rapid7, con sede en Boston. “Este es un tipo totalmente diferente de datos robados con el objetivo de dañar a la compañía”.

 

Esto debería ser una señal para todas las empresas en Estados Unidos de que necesitan “tomar la ciberseguridad tan en serio como la seguridad física de sus empleados o instalaciones”, dijo Cynthia Larose, jefa de prácticas de seguridad y privacidad en el despacho de abogados Mintz Levin, en Boston.

 

El robo de información es particularmente preocupante en Hollywood, donde se supone que la confidencialidad es primordial para asegurar que los secretos de películas valuados en millones de dólares no sean filtrados.

 

“Los estudios de películas se han comportado, por mucho, como proveedores de alta seguridad de la propiedad intelectual; las imágenes impresas han sido controladas estrictamente, los adelantos de películas tienen marcas de agua, y los que roban información son perseguidos siempre que es posible”, dijo Seth Shapiro, profesor en la Facultad de Artes Cinemáticas de la Universidad del Sur de California. Dijo que eso es lo que hace tan sorprendente que correos electrónicos filtrados mostraran que los ejecutivos de Sony al parecer proporcionaran contraseñas en correos no cifrados y cometieran otras fallas en seguridad.

 

“El aparente descuido en la seguridad de las tecnologías de la información de Sony —dada la historia de ataques anteriores— no tiene precedentes en la historia de la tecnología de los medios”, agregó. La red PlayStation de Sony Corp. fue intervenida por piratas en 2011.

 

AH