Marcelo Ebrard Casaubón, durante su mandado como jefe de gobierno del D.F, benefició a empresas francesas con contratos para construcción de la Línea Dorada del Metro, el monopolio en la distribución de píldoras abortivas, el control del alumbrado público en las principales avenidas y la videovigilancia de la Ciudad de México.

 

La Línea 12 del Metro, obra más importante de su sexenio, y que a la postre cancelada en la mitad de su recorrido, fue adjudicada en 2008 a la francesa Alstom por un contrato por más de 500 millones de dólares.

 

De acuerdo con un reporte de la revista Expansión, la adjudicación para la construcción de la Línea Dorada prácticamente rescató a Alstom, que en ese entonces se encontraba bajo investigación e inmiscuida en un escándalo mundial de corrupción por obras realizadas en Suiza.

 

Alstom construyó la Línea Dorada, que corre de Tláhuac a Mixcoac, en consorcio con las mexicanas ICA y Carso, sin embargo, en 2013, un año después de su inauguración, se descubrieron fallas en su funcionamiento que ponían en riesgo a los usuarios, por lo cual, la mitad de su trayecto fue cancelado y sus reparaciones se estiman en 900 millones de pesos.

 

Se calcula que el daño patrimonial por las fallas en la Línea 12 superan los mil 600 millones de pesos, y de acuerdo con una investigación que todavía sigue en curso, los desfalcos apuntan a la línea de mando de Marcelo Ebrard, por lo cual, los altos funcionarios encargados de la supervisión de la obra fueron detenidos.

 

Además, durante la era de Ebrard, Alstom ganó el contrato para la rehabilitación de los trenes de las Línea 8 del Metro, cuyos costos y especificaciones se encuentran reservadas por los próximos 12 años.

 

Incluso, la directora de Alstom México, Cintia Angulo, que negoció con Ebrard la adjudicación de obras por más de 500 millones de pesos, fue detenida por falsear declaraciones y un fraude en la asignación de comisiones por los contratos obtenidos.

 

Luminarias 

 

Otra de las firmas francesas beneficiadas en la administración de Ebrard es Citelum, la cual, tendrá el control del alumbrado en las principales avenidas de la capital del país hasta 2020.

 

El contrato por 2 mil 600 millones de pesos significó la privatización de 40 mil luminarias ubicadas en Paseo de la Reforma, la arteria con mayor plusvalía del país, así como la administración de la iluminación de sitios emblemáticos como el Ángel de la Independencia.

 

A raíz del contrato con el Distrito Federal, la firma francesa despegó, y en la actualidad, también desarrolla proyectos de energía en otras ciudades del país como Puerto Vallarta y Puebla.

 

“Este ambicioso proyecto tiene una duración de 10 años y entre su alcances comprende la rehabilitación total de la Av. Reforma y sus principales Rotondas así como la Av. Miguel Hidalgo y el periférico, estas implementaciones brindan a la ciudad un ahorro energético del  50%”, señala la firma francesa sobre el proyecto iniciado en la administración de Ebrard.

 

Píldora abortiva 

 

En 2007, bajo la administración de Ebrard, el Distrito Federal se convirtió en la primera entidad en legalizar el aborto, las clínicas públicas y privadas lo ofrecían con el método de Aspiración Manual Endouterina y fue hasta 2012 que se autorizó el uso de la sustancia activa Mifepristona.

 

El ex jefe de gobierno estrechó relaciones con el empresario de origen francés Sebastián André Georges Belkhelfa, quien gestionó ante la Comisión Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) la licencia de la sustancia activa Mifepristona.

 

Al autorizarla, en 2012, se creó la empresa Intelpharma Network Distribución, única autorizada para la distribución la sustancia activa a través de su medicamento Zacafemyl, con ello, obtuvo el monopolio de la comercialización del fármaco en clínicas públicas y privadas.

 

Desde ese momento, Intelpharma ha obtenido contratos con el gobierno del Distrito Federal por más de 11 millones de pesos, por la distribución de la píldora para el aborto, que en la capital del país es legal hasta antes de las 12 semanas.

 

Otra de las empresa es Thales, que en consorcio con Telmex, obtuvo en 2010 un contrato por mil 300 millones de pesos para la colocación y operación de 8 mil cámaras de video-vigilancia. En la actualidad, 109 de las Cámaras se encuentran descompuestas, según el programa Ciudad Segura.