Emma Stone se convirtió en la actriz mejor pagada del último año al percibir un total de 26 millones de dólares gracias en buena parte a su participación en “La La Land”, según una lista publicada hoy por la revista Forbes.

 

Stone, de 28 años, recibió el Óscar a la mejor actriz por su interpretación en ese largometraje, que logró recaudar 445.3 millones de dólares en los cines y que la ha llevado a su mejor año en términos de beneficios económicos.

 

En segunda posición de la lista está Jennifer Aniston, que sigue a Stone de cerca con 25.5 millones de dólares, por lo que la intérprete de “Friends” continua ingresando altas sumas de dinero una década después del fin de la exitosa serie de comedia.

 

En su caso, sin embargo, la mayor parte provienen de contratos publicitarios con compañías como la aerolínea Emirates, la línea de cosmética Aveeno y la marca de agua Smartwater, además de la venta a Unilever de los champús Living Proof, de la que poseía una parte.

 

Por su parte, Jennifer Lawrence bajó del primer puesto del año pasado al tercero, con 24 millones de dólares, un poco más de la mitad de lo que hizo en 2016, cuando la saga “The Hunger Games” supuso un excepcional ingreso.

 

Este año, sus ingresos provinieron de sus películas “Mother!” y “Red Sparrow”, además de su contrato publicitario con la casa de diseño Dior.

 

Fuera del podio se quedaron en cuarto lugar la comediante Melissa McCarthy, con 18 millones de dólares, y Mila Kunis, con 15.5 en quinta posición.

 

En sexto lugar empataron dos actrices con 14 millones de dólares: la sudafricana Charlize Theron y la británica Emma Watson, la única que este año forma parte de la lista por primera vez.

 

Completan las diez primeras posiciones la australiana Cate Blanchett y Julia Roberts, ambas con 12 millones de dólares, y Amy Addams, con 11.5 millones de dólares.

 

En conjunto, las diez actrices mejor pagadas cobraron 172.5 millones de dólares desde el 1 de junio de 2016 al 1 de junio pasado, aunque en las cifras publicadas por Forbes no se tienen en cuenta impuestos ni los porcentajes que se embolsan sus agentes, managers o abogados.

 

aarl