CARACAS.- El embajador de Venezuela en Naciones Unidas, Rafael Ramírez, informó ayer que renunció a su cargo a pedido del presidente Nicolás Maduro, luego de ser blanco de acusaciones al develarse un esquema de corrupción en la industria petrolera, la cual dirigió durante 10 años.

 

Ramírez, quien dirigió la industria petrolera entre 2004 y 2014, estaba al frente de la embajada en Nueva York desde 2015 y recientemente Maduro lanzó acusaciones en su contra ante el presunto intento del diplomático de hablar contra el gobierno.

 

Dirigentes de la oposición dijeron que Ramírez era perseguido por el gobierno por haber sugerido en una reunión su intención de buscar la candidatura presidencial por el chavismo, algo ya resuelto con el anuncio de Maduro de que irá a una reelección en las presidenciales de 2018.

 

En su cuenta de la red social Twitter, Ramírez dijo que fue removido a pedido del presidente por sus “opiniones” y prometió mantenerse “leal” al fallecido comandante Hugo Chávez.

 

Se desconoce el destino del ex embajador, de quien algunos alertaron que si regresa a Venezuela será arrestado por la policía, en medio de la cruzada que lanzó Maduro contra la corrupción en Petróleos de Venezuela (PDVSA).

 

Ramírez divulgó su decisión en medio de un escándalo por las investigaciones ordenadas por Maduro sobre hechos de corrupción en PDVSA, que hasta ahora ha llevado a la detención de sus ex presidentes Eulogio Del Pino y Nelson Martínez, relacionados con el círculo de poder dejado por Ramírez en la industria petrolera.

 

Poco antes, en un debate de la Asamblea Nacional (Congreso), los diputados de la mayoría opositora recordaron que Ramírez fue objeto de investigaciones por sus manejos en PDVSA, los cuales fueron obstaculizadas tanto por el gobierno como el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).

 

El diputado opositor Julio Montoya aseguró que la persecución contra Ramírez se debe a que reveló que aspira a la candidatura presidencial por el chavismo, a fin de retar el liderazgo de Maduro.

 

Montoya, quien investigó casos de corrupción en PDVSA desde la comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional (Congreso), dijo que Maduro sabía de lo que pasaba en la petrolera y que ahora pretende decir que lo engañaron.

 

 

Se va IATA, cúpula de aerolínas

La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) formalizará el cierre de sus oficinas en Venezuela a partir del próximo 31 de enero.

 

La decisión fue anunciada a los órganos del Estado venezolano, y con la salida los asuntos de Venezuela se atenderán en IATA Centroamérica, cuya oficina se encuentra en Panamá.

 

La salida de IATA sigue a la de varias líneas aéreas desde agosto pasado debido a lo que las empresas han denominado “problemas operacionales”.

 

Esta agrupación representa a 265 líneas aéreas que manejan 83 por cienrto del tráfico aéreo mundial.

 

Desde agosto han dejado de operar en Venezuela Delta Air Lines, Avianca, United Airlines, Dynamic Airways, LATAM, Aeroméxico, Lufthansa, Alitalia y Air Panama.

 

Siguen operando COPA Arlines, TAME, Latin American Wings y Cubana.

 

En un reporte del pasado septiembre IATA informó que el gobierno venezolano se mantenía firme en su determinación de no entregar alrededor de tres mil 800 millones de dólares correspondientes a las líneas aéreas.

 

 

 

*edición impresa 24 Horas

 

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