WASHINGTON, DC.– En un marco de tensión, desacuerdos e incertidumbre, que fortalece la expectativa de un eventual fracaso y rompimiento, México, EU y Canadá iniciaron a puerta cerrada, la cuarta ronda de negociaciones del TLCAN

 

Al recibir en la Oficina Oval de la Casa Blanca al Primer Ministro canadiense, Justin Trudeau, y a su esposa Sophie Gregoire Trudeau, el presidente Donald Trump inyectó ayer más incertidumbre al anunciar que pronto se conocerá una decisión importante sobre el tratado.

 

Lo vamos a decidir en muy corto tiempo y lo vamos a anunciar en breve” dijo Trump agregando que “ya verán que pasa” en la lucha de los tres países por proteger a su economía, empresas y trabajadores, dejando abierta la posibilidad de negociar país por país, en lugar de los dos a la vez.

 

Trudeau dijo que discutió “asuntos de seguridad y comercio”, entre los que es vital la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.

 

Un TLCAN en que Trump pretende obligar a Canadá a que elimine regulaciones que impiden un mayor ingreso de lácteos y aves de EU a ese país, cambiar las reglas de origen para que los autos fabricados en America del Norte tengan más de 50% de componentes de EU y modificaciones a los mecanismos de la solución de controversias.

 

Casi al mismo tiempo, cerca del Pentágono, Chrystia Freeland, Ministra de Relaciones Exteriores de Canadá; Robert Lighthizer, Representante Comercial de EU; e Ildefonso Guajardo, Secretario de Economía de México, iniciaron a puerta cerrada, la cuarta de siete rondas de renegociación en la que con sus equipos respectivos analizaran más de 25 capítulo del Tratado, enfocados al tema de la competencia de monopolios y grandes empresas.

 

El nuevo capítulo de competencia actualiza el original y va más allá de lo que Estados Unidos haya ido en acuerdos de libre comercio previos” dijo Robert Lighthizer, durante la apertura, según un comunicado.

 

Aseguró que EU, México y Canadá acordaron obligaciones que garantizarán más justicia en leyes de competencia, dando oportunidad de que cada quien defienda sus intereses, asegure derechos y transparencia. En lugar de cinco días, esta negociación durará siete, hasta el 17 de septiembre.

 

En esta Ronda de conversaciones, los representantes Ildefonso Guajardo, de México, y Chrystia Freeland, de Canadá, esperaban recibir en papel y de manera formal, las amenazas, sin forma ni detalles, planteadas vagamente en discursos de Trump.

 

Tom Donohue, Presidente de la Cámara de Comercio de EU y otros organismos empresariales de Estados Unidos, han criticado duramente lo que consideran “propuestas venenosas e intolerables” del equipo de Trump.

 

Hemos entrado en un momento crítico en que la Cámara (de Comercio) no tiene más alternativa que hacer sonar las alarmas” dijo Donohue.

 

Trump reiteró a la revista Forbes su discurso de “que considera inminente el fin del TLCAN:

Creo que Nafta debe terminar” dijo Trump en una entrevista publicada por Forbes el martes. Ayer dejó ver que si fracasa la negociación trilateral lo hará país por país, lo que preocupa a grandes empresas, analistas e integrantes del gabinete.

 

Sonny Purdue, Secretario de Agricultura, reconoce los beneficios del Tratado de Libre Comercio que cumple 23 años y pidió a Lighthizer, “no usar el sector agrícola como arma para la negociación comercial”.

 

Confía en que se llegue a un acuerdo, pero se muestra escéptico.

 

Honestamente” dijo Purdue “ha habido molestias en las 3 primeras rondas”, comentarios que contradicen afirmaciones de Lighthizer sobre presunto progreso de las pláticas.

 

En su visita a la Casa Blanca, Trudeau también discutió la imposición de tarifas de 220% a la venta de aviones comerciales CS-100 de la empresa Bombardier, (de capital canadiense) a aerolíneas estadounidenses.

 

La magnitud de esta tarifa ese absurda y divorciada de la realidad en el financiamiento de programas multimillonarios de aerolíneas” según un comunicado de Bombardier.

 

En caso de la prevalencia de las tarifas a Bombardier Canadá, advirtió que podría cancelar un contrato de 6 mil 300 millones de dólares con la empresa Boeing, para la compra de 18 aviones de combate 10 F/18 E y F/18F Super Hornet, para la Real Fuerza Aérea de ese país, así como equipo de apoyo y armas  para esos aparatos.

 

Con ese propósito, Canadá envío una carta el 29 de Septiembre al Gobierno de Australia, planteando la compra de F-18 usados, lo que Boeing trata de revertir mediante una campaña de relaciones públicas con el gobierno de Canadá.

 

Fuera de breves declaraciones en la Oficina Oval, Trudeau y Trump no hablaron en conferencia de prensa.

 

Trudeau tiene previsto viajar a México para hablar con el presidente Enrique Peña Nieto sobre las medidas que Trump quiere imponer para reducir el superávit comercial, así como la pretensión de cambiar las reglas para la solución de controversias.

 

Wilbur Ross, Secretario de Comercio de Trump, aseguró que un reporte de su departamento revela que  los carros fabricados en Canadá y México “no tienen suficientes componentes de Estados Unidos, por lo que el balance del acuerdo depende del cambio de las reglas de origen”.

 

Nuestro país sufre de un déficit comercial de 60 mil millones de dólares con México que golpea a las fabricas norteamericanas, mata empleos y merma nuestra economía” escribió Ross.

 

Desde la última visita de Trudeau a la Casa Blanca, Estados Unidos ha implementado acciones que lastiman a las empresas de Canadá, lo que preocupa al Congreso, al que no se ha tomado en cuenta para asesoría, en lo que algunos legisladores consideran como la determinación de terminar el TLCAN.

 

Trudeau habló con Kevin Brady presidente del Comité de Reglas y con el demócrata de más alto rango, Richard Neal.

 

Este es quizás el momento más incierto en las relaciones internacionales desde el fin de la II Guerra Mundial” dijo en Washington Chrystia Freeland, Ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, al hablar de la renegociación del TLCAN, donde la administración Trump trata de poner a sus empresas encima de todas, como una de las prioridades de su gobierno.

 

De acuerdo a analistas financieros, la tercera ronda de negociaciones, realizada en Ottawa el mes pasado, “recordó a todos que están negociando con una administración Trump volátil y poco convencional” con marcadas tendencias proteccionistas.

 

Y amenza a la prensa

Donald Trump escaló su enfrentamiento con la prensa estadunidense al sugirir que es necesario evaluar licencias de operación de las cadenas de televisión.

 

La amenaza del mandatario fue dirigida en particular contra la televisora NBC, que en fechas recientes provocó su malestar por varios reportes que él ha señalado como falsos.

 

“Con todas las noticias falsas proviniendo de NBC y las cadenas (televisoras), en qué momento es apropiado desafiar sus licencias (de operación)?. Malo para el país”, escribió el mandatario ayer en su cuenta de Twitter.

 

Poco antes Trump había criticado a la televisora por haber reportado que el mandatario quería incrementar el arsenal nuclear de Estados Unidos diez veces sobre sus niveles actuales, después de ser presentado con información que dio cuenta de la reducción que ha registrado desde 1960.

 

NBC reportó además que de acuerdo con funcionarios presentes en ese encuentro con Trump, incluyendo el secretario de Estado, Rex Tillerson, sus asesores se mostraron sorprendidos por su comentario y le explicaron los impedimentos legales y prácticos para acometer su pedido.

 

Sin embargo, Trump acusó a NBC de haber fabricado la historia.

 

“Pura ficción, hecha para denigrar. NBC=CNN!”, escribió el mandatario en un mensaje en su cuenta, más temprano, enfatizando su malestar con otra de las grandes cadenas televisoras estadunidenses.

 

La semana pasada Trump lanzó otro ataque contra NBC tras la difusión de una historia, según la cual Tillerson, sobre quien se ha especulado podría dejar la administración, habría llamado “imbécil” al mandatario.

 

 

con información de Agencias

*edición impresa 24 Horas

 

 

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