A un día de que Donald Trump asuma como Presidente de Estados Unidos, el Gobierno de México extraditó a ese país a Joaquín el Chapo Guzmán Loera, líder del Cártel de Sinaloa, donde es buscado por siete estados, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

 

 
El capo mexicano fue enviado a Nueva York, donde aterrizó en el aeropuerto de McArthur en medio de un fuerte dispositivo de seguridad. Se prevé que el narcotraficante mexicano sea recluido en Centro Metropolitano de Detención de Brooklyn, donde están algunos de los presos más peligrosos del mundo, vinculados con la célula terrorista Al Qaeda.

 

 
El Gobierno de Estados Unidos expresó su agradecimiento a México por la extradición del capo para enfrentar cargos de narcotráfico en su calidad de líder del Cártel de Sinaloa.

 
“El Departamento de Justicia extiende su gratitud al gobierno de México por su extensa cooperación y ayuda en asegurar la extradición de Guzmán Loera a Estados Unidos”, señaló el departamento de Justicia de Estado Unidos en un comunicado.

 

 
En tanto, el Quinto Tribunal Colegiado en Materia Penal en la Ciudad de México determinó este jueves negarle el amparo y protección de la Justicia Federal a Guzmán Loera en contra de los acuerdos de la SRE del 20 de mayo de 2016, que conceden su extradición a los Estados Unidos para ser procesado por seis delitos, entre los que se encuentran narcotráfico, asociación delictuosa, lavado de dinero y homicidio, además de delitos contra la salud.

 
Autoridades de la Procuraduría General de la República (PGR), entregaron a agentes de la DEA en el aeropuerto de la Ciudad de Juárez a las 16:30 horas, donde partieron en un vuelo a hacia la ciudad de Nueva York.

 

 
Su vuelo arribó al Aeropuerto MacArthur de Long Island, de la Ciudad de Nueva York a las 21:00 horas, donde será trasladado a la Corte de Distrito, donde es requerido por su probable participación en 13 asesinatos, intentos de homicidio contra policías y militares mexicanos, miembros de organizaciones rivales y lavado de dinero procedente del narcotráfico.

 

 
En un mensaje por separado, Arturo Elías Beltrán, subprocurador de Asuntos Jurídicos e Internacionales de la PGR rechazó que la extradición de Guzmán Loera tenga alguna motivación política y enfatizó que la toma de protesta de Trump como presidente de Estados Unidos, que tendrá lugar este día, no tiene nada que ver con el proceso de extradición.

 

 
“No tiene nada que ver, estamos en pleno cumplimiento del tratado y las normas internacionales”, dijo el funcionario.
Además, aseguró que cuando el criminal mexicano cumpla su sentencia en Estados Unidos, regresará a México a terminar de compurgar su pena, por 10 procesos que tiene pendientes y que con la extradición quedaron suspendidos.