El director de Redim dijo “es un niño brillante” y lamentó que el menor también ha sido usado para amenizar actos proselitistas del PRI

A estas alturas, nadie duda del poder económico y de proyección que tiene el juego por el campeonato de la NFL, mejor conocido como el Súper Tazón o Super Bowl. Al ser visto en promedio por más de 100 millones de personas alrededor del mundo, el evento se convierte en el mejor escaparate publicitario del planeta, tanto que las empresas que se quieran anunciar durante el juego o en el medio tiempo del mismo, tienen que abrir la cartera y desembolsar decenas de millones de dólares para tener 20 o 30 segundos de exposición.

 

SB XL - The Rolling Stones

 

Pero además, sirve como la mejor plataforma de exhibición para quien haya sido elegido como el encargado del show del medio tiempo. Por eso, durante los 13 minutos (que casi siempre son más) en promedio que dura dicho espectáculo, el artista en turno trata de ofrecer un performance vibrante, colorido, impactante, diferente y del que la gente hable por mucho tiempo. Es por ello que desde hace por lo menos 25 años, la NFL trata de elegir a la persona más adecuada para dicho trabajo.

 

 

Y es que durante los primeros 25 Super Bowls, el espectáculo del medio tiempo prácticamente no le importaba a nadie, pues en realidad se trataba solamente de llenar los 15 minutos de espacio entre el segundo y tercer cuartos del juego, mismos que en su mayoría eran utilizados por bandas estudiantiles y uno que otro artista más o menos conocido.

 

 

Pero todo cambió el 31 de enero de 1993, en el Rose Bowl de Pasadena, cuando el Rey del Pop, Michael Jackson -aún en su época de gloria y todavía lejos de los escándalos que lo comenzaron a envolver meses después-, se hizo cargo de manera espectacular del mentado espectáculo, al cual le dio un sentido nuevo.

 

SB XLVI - Madonna

 

Por primera vez, una superestrella de la música se adueñaba de la escena, comenzando una nueva era para esos 15 minutos de espacio entre el segundo y tercer cuartos del evento deportivo anual más visto del mundo. Jackson no tuvo acompañantes, no hubo una banda militar u otros distractores. El show era de él. Ese fue el primer gran acierto de la NFL para darle brillo a ese espacio: dejar brillar, solo, al artista elegido.

 

 

Si bien desde entonces no todos los shows del medio tiempo del Super Tazón han tenido a un artista en solitario, su época dorada se dio a principios de este siglo, cuando el 3 de febrero de 2002 apareció la banda más famosa del planeta en escena, U2, para dar un mensaje de unión tras los ataques del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York y Washington.

 

SB XLIX - Katy Perry

 

A partir de 2005, durante seis años consecutivos el espectáculo estuvo a cargo de puro peso completo en el mundo musical: Paul McCartney, The Rolling Stones, Prince, Tom Petty & The Heartbreakers, Bruce Springsteen y The Who, quienes dominaron el escenario como sólo ellos saben.

 

 

El problema es que a partir de 2011 y hasta el año pasado, con la intención de hacer mucho más familiar ese espacio (y captar a una audiencia que ni siquiera es fan del futbol americano), la NFL siguió invitando a grandes estrellas (The Black Eyed Peas, Madonna, Beyoncé, Bruno Mars y Katy Perry, entre otras) pero acompañadas de otros artistas, lo cual ha llevado a dividir a los fans que desde hace años piden que el show sea de un solo artista o grupo.

 

 

SB XXVII - Michael Jackson

 

Este año, y cuando todo mundo esperaba que el show estuviera a cargo de artistas como Muse o Metallica, la NFL dio un extraño giro al invitar a una de las artistas más polémicas y controvertidas de la escena musical a hacerse cargo del show: Lady Gaga. Por lo general, a la NFL se le asocia más con géneros como el metal o el rock puro, por lo que la elección de Gaga generó miles de críticas desde que se anunció su participación.

 

 

Puede gustar o no, y es muy difícil negar el talento de la cantante neoyorquina, pero no es una artista ni fácil de asimilar ni muy familiar que digamos. Obviamente su espectáculo lo adecuará a las circunstancias y probablemente presente algo espectacular, pero Gaga no es precisamente un modelo a seguir por las familias más tradicionales.

 

SB XXXIX - Paul McCartney

 

Sus videos, por lo general cargados de una buena dosis de sexo o cierta violencia, así como sus excesos teatrales, le han generado polémica a una mujer que ha sido acusada de haberse parado en los hombros de lo hecho por Madonna un par de décadas antes, adecuarlo al siglo XXI y obtener fama más por la forma que por el fondo.

 

SB XXXVI - U2

Sí, seguramente este domingo veremos algo mediáticamente espectacular, y si eso es los que busca la NFL, le atinó. Lástima que la liga comandada por el controvertido Roger Goodell le apueste más al show que a la música. Ahí están, olvidadas, bandas de alto calibre como ZZ Top (originaria de Houston), Guns N’ Roses, Metallica, Muse, Queen, Green Day, Pearl Jam o, en algo más ligero, Journey, Santana o solistas como Billy Joel, Bon Jovi, Elton John o hasta Justin Timberlake o Michael Bublé (que es un estupendo showman), sólo por citar algunos. Por supuesto, en gustos de rompen géneros, pero el Super Bowl merece mucho más que a Gaga.