Este lunes no sólo será el inicio para algunos planteles educativos de la Ciudad de México, Puebla y Morelos, también será el intento de la sociedad por ir recuperando sus actividades cotidianas. Tendremos que estar atentos del caos que, sin duda, generará este regreso a clases, pues no hay que olvidar que los caminos acostumbrados cambiaron.

 

Es decir, en el camino nos encontraremos calles cerradas, trabajos de remoción de escombros y, por lo tanto, las rutas rumbo a los colegios tomarán más tiempo del que estamos acostumbrados.

 

Sumado a ello deberemos estar atentos del anuncio que tendrán que hacer los Gobiernos federal y estatales para iniciar el trámite de reconstrucción de aquellos edificios colapsados o dañados por el sismo del 19 de septiembre pasado.

 

En el caso de la Ciudad de México, y al menos hasta ayer, se estaban revisando 11 mil 200 inmuebles, de los cuales se han atendido siete mil 649, principalmente en las delegaciones Benito Juárez, Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Coyoacán, Tlalpan, Xochimilco e Iztapalapa.

 

Es importante tener en cuenta esto porque justo vendrán semanas complicadas, en donde las cifras de muertos y heridos se irán modificando en menor escala, pero sí aumentara el número de familias que se quedaron sin hogar, que no puede acceder a él y que técnicamente lo perdieron todo.

 

Son familias que hasta la fecha no hemos visto su totalidad. Muchas de ellas no han llegado a los albergues, ya que han estado con amigos o familiares; otras más, en tiendas de campaña a las afueras de sus domicilios dañados.

 

Pero será este gran grupo de personas el que requiera el mayor apoyo, pues incluso son el sector que tiene mayores dudas, pues no sabe cómo accederá a los recursos financieros que darán los gobiernos locales.

 

De esta forma tendremos que permanecer atentos, al menos en la capital de la nación, del Grupo Interinstitucional de Evaluación de Daños en las edificaciones conformado por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), Protección Civil y el Instituto para la Seguridad de las Construcciones de la Ciudad de México (ISC).

 

Ayer, el jefe de Gobierno aseguró que todas las solicitudes de revisión serán atendidas y detalló la clasificación de estos inmuebles, mismos que deberemos tomar en cuenta.

 

“Tenemos en verde, quiere decir, los inmuebles que sólo van a necesitar reparaciones menores; los que se encuentran en amarillo quiere decir que no necesariamente pueden seguir en el inmueble, pero es un lugar totalmente habitable. Los rojos, es importante que la población sepa que no significa que vayan a ir directo a una demolición o que se vuelvan absolutamente inhabitables en ese momento, lo que significa es que van a requerir una revisión más a fondo, que no pueden ser objeto de habitación en la revisión y que las familias requieren esperar la conclusión de los dictámenes; quiere decir que necesitarán un dictamen estructural mucho más detallado”.

 

Hasta ayer, de los siete mil 649 inmuebles, seis mil 640 están en la clasificación verde; 688, en amarillo y 321, en rojo.

 

Pero también vale la pena hacer un llamado a las autoridades, pues la información ha sido, hasta la fecha, poco clara y de difícil acceso. Es urgente que modifiquen la forma en que van resolviendo los cientos de dudas de los afectados por el sismo.

 

caem