Surgió como un culto entre los narcojuniors. El movimiento #701 nació en 2009, luego de que Joaquín El Chapo Guzmán fuera colocado por la revista Forbes entre los hombres más ricos del mundo. Y pronto se extendió en redes sociales.

 

En Twitter existe el hashtag Imperio#701, en referencia a toda actividad y apología para el líder del Cártel de Sinaloa, en la que jóvenes presumen sin rubor gorras y playeras en apoyo a Guzmán Loera.

 

En Facebook también existe la página Imperio #701, con imágenes del capo fugado del penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México.

 

Si bien este movimiento nació hace seis años, fue el año pasado cuando tomó relevancia en redes sociales, notoriedad en manifestaciones de apoyo al narcotraficante de Badiraguato, Sinaloa, y detonó un mercado de productos que se venden de manera legal.

 

Por ejemplo, días después de ser reaprehendido en febrero pasado, en Culiacán organizaron una serie de marchas y plantones para exigir la liberación y no extradición de Joaquín El Chapo Guzmán, en lo que representó una especie de desafío para las autoridades federales.

 

De acuerdo con registros informativos, en las manifestaciones hubo personas consumiendo mariguana o arrancones frente a la policía. Algunas mujeres y niños vistieron playeras blancas con el número #701 al frente y con la leyenda “No a la extradición” en la espalda.

 

“El Chapo defensor y protector del pueblo, exigimos su liberación”, “ONU que el Gobierno Mexicano respete los derechos humanos”, “Arriba El Chapo”, “Te quiero Chapo”, “Liberen al Chapo”, se leía en cartulinas y lonas que portaban los simpatizantes del capo.

 

Además, también existe un narcocorrido que alimenta el culto para el #701. Los Alegres del Barranco cantan El 701, una canción sobre la vida del sinaloense en la que se cuenta que vendía naranjas cuando era niño para paliar la pobreza y compara a El Chapo con el terrorista Osama Bin Laden.

 

“Estoy en la lista de los más buscados, en el mundo entero ya todos lo saben,
medios me comparan con ese Bin Laden, porque también cuento con mis talibanes… 701 a mí me califican en la lista de los millonarios, de ricos influyentes que cargan billetes, pero mi riqueza es amistad de mi gente…”.