BRASILIA. La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, recibió la llama olímpica sin saber si estará en el cargo en la apertura de los Juegos de Río 2016, mientras su defensa quemaba sus últimos cartuchos para intentar impedir un probable juicio político y la Fiscalía solicitó al Supremo Tribunal que investigue al ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, a tres ministros del gabinete de Rousseff y otros 27 políticos por su presunta participación en el escándalo de corrupción de Petrobras.

 

“Brasil será capaz, conviviendo con un período difícil, crítico para su historia y la democracia” a ser el mejor anfitrión que los Juegos Olímpicos ya conocieron” apuntó la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.

 

El procurador general de la República, Rodrigo Janot, pidió que, además de Lula, se investigue a los ministros de la Secretaría de la Presidencia, Ricardo Berzoni; de Información, Edinho Silva, y al jefe de gabinete de la Presidencia, Jaques Wagner.
Lula, quien fue designado ministro por Rousseff pero aún no pudo asumir por una orden judicial, ya era blanco de dos investigaciones por supuesta corrupción y blanqueo de dinero en dos tribunales corrientes, pero la Fiscalía pidió ahora que lo indague la máxima corte del país.

 

En la lista hay importantes figuras del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), que lidera el vicepresidente Michel Temer, quien pudiera asumir el poder la semana próxima si el Senado decide iniciar un juicio político contra Rousseff.

 

Se trata de Henrique Eduardo Alves, ministro de turismo hasta que esa formación rompió con Rousseff hace poco más de un mes; el jefe de la Cámara de los Diputados, Eduardo Cunha, y Silas Rondeau, quien fue el titular de Energía durante el gobierno de Lula.

 

El fiscal también pidió investigar al asesor personte la gestión de Lula.

 

También aparecen el expresidente de Petrobras José Sérgio Gabrielli y el actual presidente del instituto dirigido por Lula, Paulo Okamotto.

 

En el documento, Janot destaca que “en el ámbito de los miembros” del gobernante Partido de los Trabajadores (PT) hay nuevos elementos que demuestran que la “organización criminal” que actuó en Petrobras “tuvo un alcance más amplio de lo que se imaginaba” y “con una enorme concentración de poder de los jefes de la organización”.

 

El fiscal general subraya que la “organización criminal” enquistada en la petrolera estatal “jamás” podría haber funcionado por tanto tiempo y de “una forma tan amplia y agresiva” en el ámbito del Gobierno federal sin la participación del ex presidente Lula.

 

En caso de que la Suprema Corte acepte el pedido de Janot, los citados engrosarán un grupo de medio centenar de investigados por su presunta implicación en la corrupción en Petrobras ya en manos del tribunal, aunque algunos de ellos ya aparecen en la lista inicial, como el caso de Cunha.