Un mexicano estudiante de la Universidad de Harvard que estuvo varios meses varado en su país de origen tras cruzar la frontera sin permiso, se apresta a volver a Estados Unidos.

 

Darío Guerrero Meneses, quien tenía 2 años cuando su familia llegó sin permiso legal a Estados Unidos, recibió el lunes temprano en Tijuana una visa estadounidense, que recogerá a media tarde.

 

El Servicio de Ciudadanía e Inmigración había dicho inicialmente que Guerrero de hecho se deportó a si mismo cuando regresó a México, a donde viajó para buscar tratamientos alternativos para el cáncer que sufría su madre, quien falleció en agosto.

 

Guerrero planea viajar a Long Beach, California, para reunirse con su padre y dos hermanos, y entonces tiene en mente regresar a Harvard el próximo año.

 

El joven descubrió su situación migratoria siendo adulto y se benefició hace dos años de una medida del gobierno del presidente Barack Obama conocida como “acción diferida” que aplazaba las deportaciones de migrantes que cumplieran una serie de requisitos: no tener antecedentes penales, haber llegado antes de los 16 años y cursar estudios superiores.

 

Sin embargo, estas personas no pueden salir de Estados Unidos sin una autorización específica del gobierno.

 

AH