BERLÍN. La canciller alemana Angela Merkel aseguró este martes que la propuesta acordada con Ankara de poner en marcha un programa para expulsar a Turquía a los inmigrantes ilegales, incluidos los demandantes de asilo sirios, que lleguen a la Unión Europea, es un “avance” y “salto cualitativo”.
Ante el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, Merkel calificó de “documento consistente” el preacuerdo alcanzado entre la UE y Turquía y lo calificó como un “importante paso” para la solución de la crisis.
“El primer ministro turco (Ahmet Davutoglu) presentó ayer por la noche al primer ministro de Países Bajos, en nombre de la presidencia del Consejo, y a mí misma, una propuesta que considero un salto cualitativo si es aplicada”, señaló la canciller.
La jefa del gobierno alemán expresó su confianza en que lo acordado anoche sea adoptado de forma vinculante, en la cita prevista para la semana siguiente, e insistió en que se trata de un instrumento importante para luchar contra la inmigración ilegal y la acción de las mafias y los traficantes.
“Pensamos que es un enfoque satisfactorio, es algo a lo que damos la bienvenida pero necesitamos más tiempo, por ejemplo hasta el siguiente Consejo Europeo, para discutir los diferentes aspectos”, añadió.
Los líderes de la UE alcanzaron un principio de acuerdo sobre las nuevas reclamaciones de Ankara para frenar los flujos hacia Europa de inmigrantes irregulares y refugiados, también sirios, que incluyen otros tres mil millones de euros y agilizar la liberalización de visados.
Sin embargo, las dos partes deben “trabajar en los detalles” del acuerdo en los próximos días, con el objetivo de concretar su contenido de aquí a la próxima cumbre europea, prevista para los días 17 y 18 de este mes de marzo.
Ban la elogia por su liderazgo moral; pide a líderes del mundo buscar soluciones
El secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, llamó hoy a los líderes internacionales, y en especial a los europeos, a buscar “soluciones basadas en la responsabilidad compartida” ante la crisis de los refugiados y subrayó el “liderazgo moral” de la canciller alemana, Angela Merkel.
En rueda de prensa en Berlín junto a la canciller, Ban no quiso comentar los detalles del principio de acuerdo alcanzado ayer en Bruselas entre los socios europeos y Turquía e insistió en la necesidad de respetar los derechos humanos y el derecho internacional.
Tampoco quiso responder con claridad cuando se le preguntó si vería a Merkel como su sucesora al frente de la ONU, pero no escatimó en elogios ante una mujer que, dijo, ha demostrado ser “una verdadera voz moral” y que ejerce un liderazgo “sólido” y “responsable” y “compasivo”.
Mientras unos líderes apuestan por construir muros, apuntó, ella defiende la legalidad internacional y los derechos humanos y frente a quienes prefieren elegir el camino más fácil, Merkel ha demostrado que un líder no se frena ante los obstáculos.
Consciente de las divisiones entre los países europeos, subrayó la capacidad de actuación de la Unión Europea (UE) y pidió a los líderes de los Veintiocho trabajar para encontrar el mejor camino ante la crisis, basado en el respeto a los derechos humanos.
Recibe rosas rojas por su política hacia refugiados
En el Día Internacional de la Mujer, la canciller federal de Alemania, Angela Merkel, recibió un gran ramo de rosas rojas que le regalaron 100 personalidades del país europeo para felicitarla por su política respecto a los refugiados.
“Queremos apoyar a la señora Merkel en su posición”, señalaron los miembros del grupo que llevó el ramo de rosas a la cancillería federal en Berlín y que fue entregado en la recepción.
En la delegación estaban quienes encabezaron la iniciativa: la productora cinematográfica Regina Ziegler y el director de cine Volker Schlöndorff, así como los actores Andrea Sawatski y Christian Berkel.
El grupo de personalidades prominentes declaró que frente a la frase de Merkel “lo lograremos” no hay alternativa. Con esas palabras reaccionó la canciller ante la llegada de miles de refugiados a Alemania, en especial en el segundo semestre de 2015. Se refería a que el país tiene la capacidad de albergar a esas personas e integrarlas en la sociedad.
Con esa frase quedó definida su política de apertura de fronteras para quienes venían huyendo de la guerra. El año pasado llegaron al país alrededor de 1.1 millones de refugiados, gran parte de ellos huyendo de la guerra en Siria, aunque también de Irak y Afganistán.
Esa frase de Merkel es también, sin embargo, el blanco de críticas contra la canciller por sectores de extrema derecha y xenófobos de Alemania Merkel defendió desde un primer momento el derecho internacional inalienable con que cuentan las personas que huyen de una guerra de pedir asilo donde puedan conservar su vida.