La Secretaría de Relaciones Exteriores anunció la remoción de Andrés Roemer Slomianski como representante de México ante la UNESCO, luego de la polémica por el voto a favor de nuestro país a una resolución que desconocía en su texto el vínculo histórico de la religión judía con el Monte del Templo y revelar documentos oficiales a representantes de países extranjeros; la dependencia añadió que cambiará el sentido de su voto para quedar en abstención.

 

En comunicado, la Cancillería explicó que la salida de Roemer Slomianski se debe a que informó a representantes de gobiernos distintos al de México del sentido de su voto y porque hizo públicos documentos y correspondencia oficiales sujetos al sigilo que le obliga la Ley del Servicio Exterior Mexicano.

 

La resolución fue considerada por la comunidad judía internacional como un ataque a su historia y religión. Aunque en principio el Estado mexicano votó a favor, hoy cambiará su postura ante el pleno del Consejo Ejecutivo de la UNESCO y con ello reiterará “el reconocimiento que el gobierno de México otorga al vínculo innegable del pueblo judío con el patrimonio cultural ubicado en Jerusalén Oriental”.

 

Ante este panorama, la Cancillería indicó que su Órgano Interno de Control comenzará una investigación y, en caso de encontrar faltas, las sancionará.

La resolución en cuestión ha suscitado polémica internacional, que inició cuando siete países árabes la presentaron ante la UNESCO. En ella se argumenta que se busca el resguardo del valor histórico de Jerusalén del este, un lugar considerado sagrado por el islam, los judíos y cristianos.

 

Sin embargo, en el documento se nombra al Monte del Templo como Haram al Sharif, como lo llaman los musulmanes, y no hay ninguna referencia sobre el vínculo histórico que tiene el lugar para los judíos, a pesar de que hay evidencia histórica de que el sitio es sagrado para ellos, incluso antes del surgimiento del Islam.