Luego de que el alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez, solicitara licencia a su cargo por 30 días, elementos de las policías Federal, Estatal y Ejército Mexicano catearon su casa en el municipio y reportaron la ausencia del político, deteniendo sólo a tres empleadas domésticas.
De acuerdo con información de Quadratín, la tarde del martes un convoy llegó a la casa de Abarca Velázquez para ser trasladado a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia estatal (PGJE )para que rindiera su declaración por los hechos del viernes pasado, en donde asesinaron a civiles y estudiantes normalistas en Iguala, pero éste ya no fue encontrado.
Por lo que autoridades colocaron retenes en las entradas y salidas de Iguala para dar con su paradero, hasta el momento no se sabe de su ubicación.
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