Dirigentes del PRD denunciaron al PRI por haber repartido cuando menos un millón 800 mil monederos electrónicos en el Estado de México, con un saldo de mil pesos cada uno, para comprar votos a favor de Enrique Peña Nieto.

 

El hecho, según líderes de la izquierda, constituye un argumento legal suficiente para que el Instituto Federal Electoral retire el registro al candidato presidencial del tricolor, de acuerdo con el artículo 354 inciso C del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales.

 

En conferencia de prensa el PRD dio a conocer un video en el que María Elena Barrera, candidata del PRI al Senado por la segunda fórmula e integrante del círculo cercano de Peña Nieto, ofrece los monederos electrónicos de las tiendas Soriana como una prueba de lo que podrían recibir ciertos grupos en caso de que el ex gobernador mexiquense gane la elección presidencial del próximo domingo.

 

“Creo que este podría ser un programa de cuidado, de apoyo de la sociedad, de unos a otros, para que de esa manera el gobierno se hace cargo y les apoya con un recurso que hoy no lo reciben y que esta tarjeta, lo que les estamos entregando y para lo que los llamamos hoy, es para que sea una muestra de lo que podríamos hacer juntos y seguirlo haciendo”, dice Barrera en la grabación realizada el pasado lunes 25 de junio en el salón Atenas de Valle de Chalco, durante una reunión con mujeres promotoras de la Iglesia católica.

 

En el video, Barrera se compromete a repartir estas tarjetas como un “apoyo” para que las mujeres convenzan a sus conocidos de votar por el PRI, aprovechando el trabajo social que realizan dentro de la Iglesia.

 

De acuerdo con Ricardo Monreal, coordinador de la campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador, el caso de los monederos electrónicos se suma a los más de 70 millones de pesos denunciados por el PAN ante el Instituto Federal Electoral que se depositaron en nueve mil 224 tarjetas de débito del Grupo Financiero Monex repartidas entre los operadores de casilla del PRI, así como al reparto de dos mil 500 millones de pesos realizados a través de 50 millones de tarjetas telefónicas.

 

“Todo es ilegal, el PRI no tiene forma de justificar esto. Es un auténtico ´Monexgate´. En cualquier país del mundo el candidato ya estaría fuera, siendo procesado penalmente. ¡Aquí es el mundo al revés! A pesar de las ilegalidades y la demostración, el IFE no han actuado”, reprochó Monreal.

 

Cuando se le preguntó si el probable rebase de los topes de gastos de campaña del PRI pone en riesgo la validez de la elección presidencial, Monreal se mostró cuidadoso para no descalificar prematuramente el proceso y hacer un llamado urgente a que el IFE, la Secretaría de Gobernación, la Procuraduría General de la República y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación tomen las medidas pertinentes “para que las elecciones se realicen en paz”.