Este martes, a las 10 de la mañana se presenta MéxicoLeaks, una plataforma tecnológica que servirá para que tips de investigaciones, documentos, fotografías y testimonios, entre muchos archivos de interés público, lleguen anónimamente a las manos de reporteros y editores de emeequis, Proceso, MVS, Periodistas de a Pie, Animal Político, Más de 131 y la Red en Defensa de los Derechos Digitales(R3D).

 

Este proyecto se ha desarrollado en los últimos ocho meses en las redacciones de los medios mexicanos, que fueron invitados directamente por la ONG holandesa Free Press Unlimited (@freepressunltd), dedicada a garantizar flujos transparentes de información en todo el mundo.

 

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Usan la mejor tecnología disponible para proteger el anonimato de las fuentes. “Ni siquiera nosotros sabemos el origen de la información”, aseguran.

 

Es interesante esta iniciativa que semeja proyectos como Cryptome, de John Young y Deborah Natsios, WikiLeaks, de Julian Assange, y The Intercept, de Glenn Greenwald y Laura Poitras.

 

Los tres proyectos que menciono tienen sistemas de cómputo muy sofisticados, pues deben proteger la identidad de personas que en algún momento pueden ser objetivo de una nación tan poderosa como Estados Unidos. En este caso, basta mencionar la frágil situación de Edward Snowden o la huída de Assange, para eliminar cualquier duda.

 

En México se implementó una red muy segura que impedirá que se ubique a la persona que comparte información. Hackers de alto calibre estuvieron involucrados en el sistema de seguridad.

 

El filtrador podrá elegir si su archivo va a todos los medios o para algunos en específico. Los periodistas están listos para confirmar la veracidad de la información y comenzar a compartirla en sus plataformas.

 

Yo soy un seguidor de Cryptome, librería de archivos que existe en línea desde 1996 y que se ha cuidado de la censura y, asegura Young, caer en tentaciones comerciales o golpes de gobierno. Aunque lamento que a veces es radical.

 

En octubre de 2013 les contaba en este mismo espacio que Cryptome preguntó si la ambición había tomado lo mejor de Greenwald, el hombre que sacó a la luz los documentos de Snowden en The Guardian, al aceptar unirse con Pierre Omidyar, el millonario que fundó eBay.

 

“¿Es ésta una táctica del Estado Profundo para cooptar una voz crítica?”, preguntó Cryptome ante el inminente lanzamiento deThe Intercept (Young, por cierto, también está muy en contra de Julian Assange, quien alguna vez le sugirió ser socios. Lo acusa de sobornar a banqueros a cambio de no dar a conocer archivos filtrados).

 

Young volvió a atacar después de que Greenwald renunció a The Guardian y anunció que crearía una organización de noticias con el multimillonario.

 

Aquí les conté que Omidyar había mantenido un bajo perfil desde que dejó eBay. Pero regresó cuando leyó que Jeff Bezos, de Amazon, compraba The Washington Post por 250 millones de dólares.

 

“Ese proceso me dejó pensando acerca de qué tipo de impacto podría crearse si una inversión similar se hiciera en algo totalmente nuevo, construido desde cero. Algo en lo que yo pudiera estar personalmente involucrado además de mis otros esfuerzos como filántropo”, escribió Omidyar en la red.

 

Y así surgió The Intercept.

 

Cryptome se molestó y dijo:

 

“Todo puede aplicar. Omidyar y Greenwald comparten una fe en la monetización de la información bajo la bandera del servicio público, que es obligatorio en los negocios, entre otras cosas, marcando el valor con proclamas de honradez, fiabilidad, reputación, honestidad, ética, seriedad, lealtad y un montón de otras promesas que inevitablemente favorecen el negocio (y a las ONG que fingen no ser negocios) sobre el cliente”.

 

Si Omidyar y Greenwald se adaptan perfectamente, dice Cryptome, veremos como una start-up de gran alcance se convierte en un monstruo económico.

 

En el caso de México, desearía que esta iniciativa llamada MexLeaks se convirtiera en un monstruo económico que sirviera de contrapeso a esos grandes medios que abiertamente lucran con la información, simulando hacer periodismo.

 

@MexLeaks explica en Twitter que es una plataforma 100% independiente, sin afiliación a gobiernos y sin agenda oculta. “Trabajamos por la ciudadanía mexicana”. Y yo le creo a Nacho Rodríguez Reyna, Daniel Moreno, Alejandra Xanic, Daniel Lizárraga y muchos de los que estarán involucrados en esta gran iniciativa.

 

Ellos te invitan: “Al enviar información que sirva para demostrar abusos y corrupción, estás ayudando a construir un país más transparente y justo ”.

 

 

 

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