Pese a haber recibido una sentencia de 34 años de cárcel luego de que las autoridades acreditaron su responsabilidad en los delitos de delincuencia organizada y secuestro, Isidro Solís Medina alías El Chilo, ligado también al secuestro de Silvia Vargas, hija del ex titular de la Comisión Nacional del Deporte (Conade), Nelson Vargas, ocurrido en diciembre de 2007, obtuvo su libertad gracias a que el poder judicial le otorgó un amparo directo.

 

Ayer, tanto la presidenta de la organización civil Alto Al secuestro, Isabel Miranda de Wallace, como el empresario, Nelson Vargas rechazaron la determinación del magistrado José Merced Pérez Rodríguez Tercer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Segundo Circuito, quien “indebidamente” concedió un amparo a Isidro Solís, argumentando violaciones al debido proceso del implicado.

 

En el marco de su acostumbrado reporte mensual sobre la incidencia de secuestro en el país, la presidenta de la ONG señaló que el implicado El Chilo fue detenido, juzgado y sentenciado a 34 años de cárcel debido a que pudo acreditarse su responsabilidad en los delitos de delincuencia organizada y secuestro, sentencia que fue confirmada por un tribunal unitario.

 

Sin embargo, de acuerdo con el historial del expediente 41/2015, con fecha del 29 de junio de 2015 se indica de las gestiones realizadas a fin de dar cumplimiento a la ejecutoria de amparo promovido por Solís Medina, y se indica textual:

 

“Ordenó la inmediata y absoluta libertad de Isidro Solís Molina o Isidro Solís Medina, únicamente por respecto de los hechos materia de la causa penal 1/2009, instruida por los delitos de delincuencia organizada y privación ilegal de la libertad en la modalidad de secuestro, para lo cual, requirió al Director del Centro Federal de Rehabilitación Psicosocial, en Ayala, Morelos, a fin de que ordenara a quien correspondiera, poner en inmediata libertad al citado quejoso, únicamente por los delitos en mención”.

 

De acuerdo con Alto al Secuestro, el magistrado ponente Pérez Rodríguez habría concedido dicho amparo directo, toda vez que el quejoso señaló que la víctima (una persona identificada como “Juan”) lo reconoció a través de la cámara de Gesell sin la asistencia de un abogado defensor.

 

Con base en la investigación de la asociación se indica que el otorgamiento en favor de El Chilo, vinculado como integrante de un grupo criminal se establece que “en el momento en que fue realizado el reconocimiento, la normatividad no requería la presencia del imputado en la cámara de Gessel”.

 

Solís Medina o Molina fue plenamente señalado como participe en varios secuestros y delincuencia organizada por las declaraciones ministeriales de los policías que lo detuvieron junto con Ángel Cisneros Marín alias El Azul, quien también lo vinculó con los crímenes, testimonios de cuatro víctimas, así como las declaraciones de siete personas ligadas a labores de negociadores o pagadores en los plagios.

 

Fue en septiembre de 2007, cuando la joven de 18 años de edad, Silvia Vargas fue secuestrada al sur de la Ciudad de México cuando se dirigía a su escuela. Un año después, Nelson Vargas acusó a presuntos integrantes de Los Rojos como los autores del plagio; para diciembre de 2008 en una casa de seguridad en la delegación de Tlalpan fueron hallados los restos de Silvia Vargas, y en abril del año siguiente un juez dictó auto de formal prisión a sus presuntos captores, entre ellos a El Azul y El Chilo, hoy en libertad.

 

“Manifestamos nuestra alarma y preocupación por las libertades que los jueces  y la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) están otorgando a procesados y sentenciados, aplicando criterios en los cuales no piensan en las víctimas del delito,  perdiendo el objetivo principal que es impartir justicia, no dejar impune el delito,  proteger al inocente  y dar a cada quién lo que merece”, acusó la activista.

 

Por su parte, el ex promotor del deporte alertó que esta medida podría implicar una ruta hacía la impunidad, con la liberación de más implicados. “No hay ningún criterio que pueda decir que no secuestraron y asesinaron a mi niña toda esa banda; hay 60 tomos; 10 son de evidencias periodísticas. Este es un caminito para que salgan los otros; seguramente (esa organización criminal) tiene un poder increíble dentro de la justicia mexicana”, acusó Vargas en entrevista radiofónica con Adela Micha.