La situación económica del país ha orillado a la población a dejar de consumir medicamentos antigripales y para infecciones estomacales, mismos que son sustituidos por remedios naturales, reveló la consultora IMS Health Institute en sus previsiones para la industria farmacéutica en el país.

 

Esta situación, aunada a las dificultades para distribuir medicamentos por las condiciones de inseguridad, impactará en una reducción del mercado farmacéutico de entre 1 y 2% para 2014. En comparación con 2013, para este año la situación ya implicó pérdidas por unos 4 mil 872 millones 500 mil pesos.

 

Si bien los medicamentos considerados dentro de la canasta básica están los analgésicos, antigripales y antibióticos, su consumo se ha reducido de acuerdo con el análisis que hizo para México el IMS Health Institute.

 

“Al haber menos poder adquisitivo de la gente por el impacto que ha tenido la reforma financiera, uno de los segmentos que tiene mayor impacto en reducción es el de los medicamentos de venta libre, que la gente decide ir a comprar. La gente lo sustituye por otras alternativas no terapéuticas o no medicamentosas, o elimina su consumo”, explicó en entrevista con 24 HORAS Diego Ayala, director de Marketing de IMS Health Institute para Latinoamérica.

 

En algunos casos, no son “necesarios” como suplementos vitamínicos medicamentos que contienen fibra o medicamentos dermatológicos (para proteger la piel o disminuir las arrugas), pero también se ha reducido el consumo en productos para reducir síntomas de enfermedades, como antigripales, antiácidos y antibióticos para infecciones estomacales y respiratorias.

 

Lo que la gente está haciendo ahora es sustituir, por ejemplo, los antiinflamatorios por tomar más agua y líquidos, beber jugos que contengan cítricos o cambiar sus hábitos para incluir alimentos ricos en vitaminas, que puedan estimular su sistema inmune o comer alimentos que contengan fibra, por ejemplo, para combatir el estreñimiento.

 

Según el documento “Perspectiva Mundial de Medicamentos a 2018” IMS Health Institute, en el resto del mundo se esperan crecimientos de hasta el 30% de la industria farmacéutica en los próximos cuatro años. El valor total del mercado mexicano fue de 194 mil 900 millones de pesos en 2013 y de ahí ha ido en declive, pues para finales de este año se espera una compactación de entre 2 y 3%.

 

“México se separa de las tendencias globales. Estamos esperando un crecimiento bastante menor: para 2015 se proyecta una caída entre el 1 y 2% en unidades. Para los próximos años estamos esperando de cerca del 4%. Esta caída es en la venta de unidades de medicamentos de patentes y de genéricos también”.

 

De acuerdo con un estudio que terminó en agosto el Centro de Análisis Multidisciplinario de la Facultad de Economía de la UNAM, en los últimos 27 años los mexicanos han perdido el 78.66% de su poder adquisitivo. Esto quiere decir que la proporción del incremento en la canasta básica ha ido de cuatro a uno con respecto al salario mínimo.

 

En la caída en la compra de medicamentos -que para 2014 ha implicado la venta de 96 millones 950 mil unidades menos- también ha afectado la violencia porque cada vez es más difícil consolidar rutas de distribución.

 

“Es una mezcla de factores: la reducción de poder adquisitivo y la distribución, creo que son los dos temas que mayor impacto tienen, la violencia no impacta directamente. La gente también está migrando más a ir al sistema de salud pública donde hay un abasto relativamente completo. La gente está utilizando más el sistema público y el sistema público le otorga medicamentos de forma gratuita”.