En el segundo día de boicot electoral, el magisterio disidente radicalizó sus acciones y desalojó a decenas de militares que resguardaban las sedes del Instituto Nacional Electoral (INE) en cuatro juntas distritales de Oaxaca.

 

Los integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) advirtieron al Ejército, desde la noche del lunes, que no permitirían su presencia durante las protestas.

 

Fue ayer por la mañana que en las sedes distritales 08, Oaxaca de Juárez; 09, Santa Lucía del Camino; 04, Tlacolula; y 10, Miahuatlán de Porfirio Díaz, los soldados, con sus armas y pertrechos, fueron desalojados por los maestros.

 

De acuerdo con los hechos reportados, las brigadas de maestros ingresaron por la fuerza a las instalaciones del INE, que eran custodiados por decenas de militares, mismos que fueron prácticamente corridos.

 

Además, el pasado lunes un grupo de profesores también sacaron a elementos de la Sedena de la junta distrital de Miahuatlán y Juchitán.

 

Por mandato constitucional, derivado de la reforma política de 2014, el resguardo de boletas electorales es considerado como un asunto de seguridad nacional y los edificios del INE son catalogados como instalaciones estratégicas para el país, por lo que su custodia está a cargo de las fuerzas armadas.

 

Sin embargo, a partir del lunes se han presentado ataques a las sedes del INE en Puebla, Xalapa, Tlapa de Comonfort, Guerrero y Oaxaca que han derivado en la quema de edificios y boletas electorales que se utilizarán en las elecciones del próximo domingo.

 

Los ataques de la CNTE no sólo son a instalaciones del INE, sino, que otras instalaciones estratégicas como las plantas de almacenamiento de Petróleos Mexicanos (Pemex) han sido bloqueadas, lo cual ha impactado en el desabasto de combustible en la región.

 

En el municipio de San Francisco Lachigoló a escasos kilómetros de la capital de la entidad, el magisterio disidente mantiene bloqueada la planta de abastecimiento de Pemex.

 

De acuerdo con reportes, más de 17 gasolineras agotaron sus reservas de combustibles y al menos otras 10 están en riesgo, por lo cual, los empresarios consideran una situación grave que por segundo día la CNTE mantenga el control del estado.

 

A cuatro días de las elecciones, el magisterio disidente mantiene tomadas las 11 juntas distritales de Oaxaca, gasolineras, casetas y, además, brigadas de maestros colocaron retenes en diferentes regiones de la entidad para impedir el paso a funcionarios electorales.

 

El boicot electoral se extiende por el corredor del sureste mexicano, en cuyos estados (Oaxaca, Guerrerro, Michoacán y Chiapas) está el principal bastión de la CNTE y donde el próximo domingo, miles de ciudadanos están llamados a votar.

 

Por su parte, Rubén Nuñez, líder de la sección 22 de la CNTE, advirtió que el boicot electoral continuará hasta el día de la jornada electoral, “Hay un acuerdo de la asamblea nacional al boicot a la farsa electoral”.

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