En 2016, 91 de cada 100 reclamaciones que se hicieron a la banca, las tarjetas de crédito (TDC) y débito (TDD) fueron los productos que tuvieron un mayor impacto, siendo esta última el plástico con más reclamaciones tuvo en los últimos cuatro años, al pasar de 26% a 34%, de acuerdo a cifras de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).

 

 

Las TDC y las TDD son los productos de mayor uso por los beneficiarios de la banca, pero también son los servicios que más presentan reclamos por consumos no reconocidos, según el reporte R27.

 

 

Durante el año pasado, el monto reclamado en Tarjeta de ascendió a siete mil 241 millones de pesos, abonándole 72% a los usuarios, mientras que en tarjeta de débito el monto reclamado suma tres mil 647 millones de pesos y abona 55% del total, es decir dos mil 11 millones de pesos.

 

 

Las instituciones con mayores reclamaciones en relación a las TDC, fueron BBVA Bancomer con 29% del total, seguida de CitiBanamex con 26% y Banco Santander con 16%. En cuanto a las TDD, CitiBanamex fue la primera en ocupar el puesto con 22%, Bancomer con 19% y Banco Azteca con 19%, siendo el concentrado de estas tres instituciones más de la mitad del total.

 

 

Infografía: Juan Ángel Espinosa

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Mientras tanto, el dispositivo que permite el cobro de un bien o servicio en un comercio a través del uso de una tarjeta de crédito o débito, conocido como Terminal Punto de Venta (TPV) representó 40% de reclamaciones en tarjetas de crédito, sólo seguido del Comercio por Internet con 26% y las transacciones generadas por el Banco con 20%, así como por el uso de cajeros automáticos (ATM) con 2%.

 

 

Por su parte, en TDC, la TVP también fue el canal que recibió el mayor número de reclamaciones por los usuarios (41% del total) sólo después de los cajeros y el comercio por Internet con 24% y 22% respectivamente.

 

 

De acuerdo a la Condusef, los principales motivos de inconformidad provienen de los cargos no reconocidos, servicios no contratados, así como a domiciliaciones o cobro de servicios no solicitados y dinero no entregado en los cajeros automáticos, entre otros.