La fotografía es un testigo de nuestro pasado. Las imágenes que registran los periodistas o las personas en general son el vínculo que nos transporta años atrás con el fin de reflexionar sobre los episodios traumáticos que se fijaron en la memoria colectiva.
Ejemplos hay varios: guerras, desastres naturales y tragedias, son temas que envuelven una serie de significados y con los cuales las personas asocian determinadas ideas.
Sin embargo, ¿qué pasa cuando se juega con estos iconos? ¿Es válido tomar tragedias para intentar cambiar sus significados? Con estas preguntas se enfrentó el artista polaco Zbigniew Libera para crear su serie Positivos, donde retoma fotografías impactantes para nuestras emociones y las interviene para generar un juego con nuestros ojos y recuerdos.
“Nunca vemos algo por primera vez, siempre vemos un objeto y regresamos a la imagen que hemos visto de este objeto anteriormente. Siempre damos un paso atrás en nuestra memoria regresando a la imagen previa. Siempre vemos nuestros recuerdos de las cosas y no las cosas mismas. Es como un viaje permanente en nuestros recuerdos”, explica Zbigniew sobre el motivo de su trabajo.
En la serie destaca el negativo titulado En Nepal, en el cual utiliza a Kim Phue que sufrió quemaduras en su cuerpo durante la invasión estadunidense, pero a diferencia de ella, la niña que aparece en la copia cambia los gritos por sonrisas mientras las personas a su alrededor comparten la misma alegría.
En otro aparecen unos prisioneros judíos cubiertos con cobijas y chamarras detrás de un alambrado para evitar que escapen del campo de concentración, pero en la nueva toma los supuestos reos parecen disfrutar el momento porque en su cara se dibujan gestos de risa como si los crímenes que ahí se cometieron nunca hubieran sucedido.
“La serie es otro intento de abordar el trauma. Constantemente estamos en contacto con objetos de nuestra memoria y no con los objetos mismos. Quiero emplear el mecanismo de ver y recordar y abordar el fenómeno de la memoria después de haber visto una imagen. Así es como se perciben después de haber visto una imagen”, argumenta.
Sin duda, en el receptor las ideas pueden variar desde una molestia porque se puede interpretar este trabajo como una ofensa en contra de aquellos que vivieron esos sucesos hasta el otro extremo de coincidir con la reflexión de Zbigniew Libera respecto a cómo no vemos lo que es sino regresamos al lado negativo de la historia.
Por ello, la artista Annemarie Bas, traductora del portal de fotografía ZoneZero, es contundente al señalar: “Positives nos desafía a preguntarnos si realmente hemos observado las fotos icónicas que nos rodean y si hemos reflexionado sobre los relatos conectados a ellas”. (Con información de La Tempestad y Zonezero)